l finalizar la anterior temporada, la 1932-33, el Deportivo Alavés desciende a Segunda División. Le hubiese bastado ganar el último partido de Liga, jugado en Mendizorroza frente al Valencia (1-1), para haber conservado la categoría, pero el empate favorece a los valencianos, que son los que se mantienen entre los diez grandes de nuestro fútbol. Ayer les tocó al Europa de Barcelona (1930-31) y Real Unión (1931-32), hoy al Deportivo Alavés (1932-33), mañana será el Arenas de Guecho (1934-35), que no se materializa su descenso en la temporada 1933-34 al ampliarse la categoría a 12 equipos. El único de los históricos que regresará a Primera será el albiazul, pero habrá que esperar hasta 1954.
De nuevo toca jugar en la categoría de plata del fútbol estatal, categoría que ya conoce el Deportivo Alavés de las temporadas 1928-29 y 1929-30. Será una estancia corta porque, al acabar la presente campaña, los albiazules vivirán un nuevo descenso, pero una remodelación del fútbol español les permitirá seguir jugando en el Grupo I de Segunda División, categoría a la que renuncia por falta de medios económicos.
La plantilla que dispone Baltasar Albéniz, que hace las funciones de jugador-entrenador, no conserva la grandeza de las buenas épocas, ya que muchos jugadores que pasaron por las filas del Deportivo Alavés están en otros conjuntos con más recursos económicos: Roberto (Athletic), Unamuno y Lecue (Betis), Beristain (Real Sociedad), Ciriaco, Quincoces y Olivares (Real Madrid), Chomin Rey (Athletic de Madrid), Fede, Deva y Euskalduna (Sevilla), Juan Ramón (Gimnástico de Valencia), Juanito Echevarría (Arenas de Guecho), Sañudo (Valladolid), Castro (Oviedo). La falta de dinero los ha llevado lejos de Mendizorroza y casi todos juegan en Primera División.
Con modestia se encara el campeonato de Segunda, tras haber sido colista en la Serie A de Vizcaya por detrás de Athletic, Arenas, Barakaldo y Erandio. El comienzo es aceptable tirando a bueno. En los tres primeros encuentros los albiazules no conocen la derrota: empate fuera contra el Unión de Irún (1-1) y empate y victoria en casa frente a Sabadell (2-2) y Celta (2-1), en la cuarta jornada.
La tercera, frente a Osasuna, fue aplazada por orden del Ministerio de Gobernación. A partir de la victoria frente a los gallegos, el Alavés no va a conocer ninguna victoria. Algunas derrotas son escandalosas: Sevilla (4-0) y Osasuna (10-2), fuera de Mendizorroza, y en casa frente al Sporting de Gijón (3-4), Athletic de Madrid (2-5) o Unión de Irún (2-4). En la sexta jornada ya es colista. El 4 de febrero el conjunto albiazul debe recibir al Sevilla, según el calendario de la competición, que pelea con el Athletic de Madrid por el ascenso a Primera.
A partir de la noche del jueves 1 de febrero comienza a nevar de manera abundante sobre Vitoria. La directiva albiazul avisa a la andaluza de que no emprendan viaje, ya que el partido no se va a poder disputar tal y como está de nieve Mendizorroza. En aquella época era preceptivo y estaba federativamente ordenado, que los equipos actuaban en su terreno de juego, abonasen el viaje al rival. El Alavés comunica al Sevilla en este caso que lo hará una vez se haya fijado nuevo día y horario para este encuentro.
El partido se aplaza y se fija una nueva fecha para la disputa del mismo. Pero el encuentro no se disputa porque el Deportivo Alavés no envía el dinero, 1.400 pesetas (8,40 €), para el viaje del Sevilla a la capital gasteiztarra. La Federación da vencedor del encuentro a los sevillanos (0-1), que con varios ex albiazules en sus filas y Moncho Encinas como entrenador, ascenderán a la máxima categoría del fútbol estatal por primera vez en su historia al finalizar la temporada.
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4 de febrero de 1951. Fin a la racha de 11 partidos sin perder. En el Stadium Gal, Real Unión-Alavés (1-0).
4 de febrero de 1981. En partido aplazado el Alavés vence al Ceuta (2-0) y está a un punto del Castellón, líder de 2ª.
4 de febrero de 1998. Cuartos de final ida en Copa. 3-1 al Deportivo y Mendizorroza patas arriba con un gol de Javi Moreno.
"En la Sociedad no hay actualmente dinero alguno. Ni posibilidad de obtenerlo, porque el partido frente al Sevilla no hubiera proporcionado casi ingreso. Creo que la Federación ha sido exigente al obligarnos a jugar. Calculamos que se hubiese obtenido una taquilla de 400 pesetas (2,40 €)".
"La Liga se jugará la temporada próxima mediante un plan de zonas geográficas cercanas y con la ampliación de equipos en todas las divisiones. Nuestro propósito es jugar en la Segunda con los menos gastos posibles".