- Tras tener que poner en marcha un protocolo de actuación a marchas forzadas para resolver la pasada temporada con diez partidos en menos de dos meses, LaLiga y la Federación Española de Fútbol han aprobado una serie de medidas excepcionales en sus normas y bases de competición para tratar de que la posible incidencia de la pandemia en los clubes tenga la mínima repercusión posible dentro de un calendario apretado de fechas al máximo y que marca la conclusión de la temporada en Primera División para el 23 de mayo como muy tarde. La decisión de mayor calado es la que afecta a los aplazamientos y que va a conducir a que todos los equipos intensifiquen todavía más las medidas de higiene y seguridad. No en vano, solo se podrá retrasar un partido para que sea posteriormente recuperado en el calendario por no disponer del mínimo de jugadores necesario -que se reduce de forma drástica también- por contagios del coronavirus, siempre y cuando se produzca en las primeras treinta jornadas. A partir del segundo aplazamiento o de la trigésima jornada, dicho encuentro se dará por perdido al conjunto afectado -en el caso de que sean dos los equipos afectados en un enfrentamiento directo, los dos sufrirán una derrota- y así sucesivamente, aunque no tendrá una mayor penalización en la clasificación con la pérdida añadida de puntos y la doble incomparecencia no será castigada con la expulsión de la competición.
"En caso de imposibilidad de celebrar un encuentro como consecuencia de hechos relacionados con la pandemia , tales como la no disponibilidad mínima de al menos trece futbolistas, la imposibilidad de desplazamiento por prohibiciones sanitarias, el cierre de instalaciones siempre que esta situación se produzca dentro de las 48 horas anteriores a la disputa del encuentro u otras de naturaleza similar derivadas del covid, se deberá acordar el aplazamiento del encuentro a una nueva fecha . El número máximo de aplazamientos para los clubes de Primera será de un único encuentro. En todo caso, no será posible el aplazamiento de los partidos cuando las circunstancias descritas anteriormente se produzcan con posterioridad a la jornada 30. No se contabilizará como partido suspendido al club que no fuera responsable de la suspensión. Superado el límite de encuentros que pueden suspenderse o cuando se produzcan en las últimas jornadas señaladas se dará por ganador (3-0) al equipo que estuviere en disposición de disputar el partido", dice el texto.
Dentro de las cláusulas específicas por el coronavirus que se han adoptado en las bases y normas de competición -se advierte que las mismas pueden ser variadas por motivos de fuerza mayor y también se puede determinar la paralización del curso en caso de necesidad-, también destaca la rebaja de disponibilidad mínima de futbolistas hasta los trece y se permitirá que la obligación de jugadores del primer equipo sobre el césped baje de siete a cinco en caso de contagio masivo -partiendo de ese mínimo, se tienen que alinear todos los disponibles-, aunque, eso sí, ninguno de ellos podría abandonar el terreno de juego, ya que esa situación sería penalizada como una incomparecencia. Todo ello, siempre refrendado por los médicos.
De la misma manera, también se contempla la posibilidad de que un club no pueda utilizar su propio estadio para sus partidos como local -ya sea por problemas higiénicos en el mismo o por quedar limitado el acceso a su territorio- y para ello se ha solicitado a los equipos un estadio alternativo fuera de su propia comunidad autónoma al que puedan desplazarse en caso de necesidad, que tendrán que presentar oficialmente antes del próximo 18 de septiembre.
Pruebas. Dentro de los planes semanales de trabajo de cada equipo, el paso de las pruebas pcr semanales es uno de los puntos ineludibles, como bien se encargó de demostrar el Deportivo Alavés en su planificación para los días venideros publicada ayer. Jugadores, técnicos y trabajadores en contacto directo con la plantilla se someterán hoy y el próximo sábado a dos nuevos exámenes PCR, obligatorios de cara al inicio de la competición, que en el caso del Glorioso arranca el próximo lunes con la visita del Betis a Mendizorroza. Tras guardar descanso durante el día de ayer, Pablo Machín ha dispuesto dobles sesiones de trabajo para hoy, mañana y el jueves, mientras que a partir del viernes el entrenamiento será solo en horario matutino, el domingo en Mendizorroza.
Se podrá recuperar el primer partido suspendido, pero desde el segundo el resultado será de derrota sin más penalización clasificatoria