- El estreno de Juan Ramón López Muñiz al frente del banquillo del Deportivo Alavés llegó el viernes en uno de los escenarios más complicados y está claro que el técnico asturiano no tiene ninguna varita mágica para darle la vuelta a los resultados, pero, dejando a un lado la sexta derrota consecutiva, al menos el cuadro albiazul ofreció una imagen bien diferente a la que venía desprendiendo en sus últimos compromisos. Siguió sufriendo en exceso en defensa y acabó encajando dos nuevos goles, pero en la ofensiva al menos se quitó de encima las ataduras que habían reducido su ataque casi a la mínima expresión e importunó lo suyo a un Real Madrid en el que Thibaut Courtois a punto estuvo de ver truncada su racha de imbatibilidad, siendo obligado a emplearse a fondo para, con un poco de fortuna de su lado, mantenerla. Las sensaciones fueron innegablemente mejores, pero de la buena imagen no se vive y la gasolina que necesita este equipo en la carrera por la salvación solo la dan los puntos. Además, no sería la primera vez que un espejismo esconde la realidad del desierto, pues el cuadro albiazul ya firmó una actuación más que aseada en su visita al Atlético de Madrid para volver a desplomarse a continuación. El recién llegado López Muñiz ha marcado unas pautas claras, sobre todo de agradecer en un ataque que estaba completamente deslavazado, pero mañana mismo requieren de una continuidad que venga ya acompañada de esos puntos tan necesarios.

"Jugamos un partido atrevido para intentar llevarnos los tres puntos. Creo que se han visto cosas positivas, pero también otra que hay que mejorar. Hay que recuperar, reforzar lo positivo y trabajar lo negativo para encontrar soluciones en un alto porcentaje contra el Getafe. Hay que ser optimistas, pero el optimismo no quiere decir que vayamos a ganar sin correr. Contra el Getafe hay que hacer el mismo esfuerzo o un poco más", señaló el preparador asturiano al final del partido del viernes en Valdebebas.

A nivel defensivo el sufrimiento volvió a ser evidente, aunque los dos goles del Real Madrid llegaron más por errores que por la calidad de un rival que se topó en muchas ocasiones con Roberto. Un penalti innecesario de Ximo Navarro a Ferland Mendy y un despiste de Víctor Laguardia que rompió el fuera de juego de Karim Benzema desequilibraron el partido. Pero, como venía siendo costumbre en la etapa de Asier Garitano, el Alavés se defendió excesivamente cerca de su portería. Una actitud que no gusta a López Muñiz, que prefiere tener las líneas más juntas y adelantadas.

"Tenemos que corregir ciertas cosas y dar un paso adelante en intensidad, distancia de líneas a lo largo y a lo ancho, pero me ha gustado mucho que hemos mantenido el juego en una zona en la que vamos a crear peligro con nuestra velocidad si recuperamos el balón. tenemos que defender más alejados de nuestra portería y más intensos. Hay que intentar dejar la portería a cero en los tres partidos porque es mucho más sencillo meter un gol que cuatro", aseguró.

Si el apartado defensivo está siendo preocupante, no menos quebraderos de cabeza está trayendo el ataque. Solo tres goles desde la reanudación del campeonato, pero lo cierto es que esa cifra tan baja de dianas se entiende a la perfección teniendo en cuenta que las oportunidades generadas han sido escasas. Partidos enteros sin buscar la portería rival, sin probar los reflejos de los guardametas o sin tan siquiera un uy que llevarse a la boca. Un estropicio descomunal que en el estadio Alfredo Di Stéfano quedó superado ampliamente. Y es que en un solo encuentro, El Glorioso, pero el cuadro vitoriano fue capaz de generar mucho mediante un arsenal ya conocido como el dominio del juego aéreo de Joselu o las apariciones letales de Lucas Pérez, pero también a través de una capacidad de desborde por los costados que apenas se había vislumbrado hasta la fecha. Queda atinar en el momento decisivo, pero, en este sentido, considera López Muñiz que la senda es bastante positiva.

"Me preocuparía no haber tenido ocasiones de gol; eso sí que sería preocupante. Las hicimos y no las fallamos, hizo grandes paradas e portero; los remates eran buenos, pero las paradas fueron espectaculares. Cuando no tienes ocasiones te preocupa; cuando tienes, ya llegará el gol. Tenemos grandes delanteros que meterán esas ocasiones. Me ha gustado que el equipo ha sido atrevido, que ha jugado cerca de la portería contraria. Cuando robábamos el balón, teníamos opciones de salir al ataque. Hay que tener más tranquilidad para no cometer pérdidas por precipitación. Contra el Getafe todo va a ser diferente porque va a exigir un nivel físico muy alto que hay que igualar para contrarrestar al rival", señaló el asturiano, consciente de que esta mejoría no puede quedarse en un espejismo y que requiere continuidad mañana.

"Hay que ser optimistas, pero el optimismo no quiere decir que se va a ganar sin correr"

Entrenador del Deportivo Alavés