vitoria - Debido a su prematura eliminación de la Copa del Rey, el Deportivo Alavés tiene ahora por delante dos semanas de trabajo antes de disputar su próximo encuentro oficial. En la tarde de ayer retomó la actividad con una sesión de entrenamiento en Ibaia en la que Asier Garitano pudo contar con todos sus jugadores. A excepción, claro está, de un Tomás Pina que al menos ofreció la buena noticia de su presencia junto al resto de sus compañeros, aunque fuera en la enfermería. El manchego se encuentra aún en la fase inicial tras su largo proceso de recuperación tras ser operado pero ya trabaja con cierta intensidad en el gimnasia.

Precisamente la baja del centrocampista para toda la temporada es uno de los grandes problemas que padece el conjunto vitoriano. Se trata de una pieza clave en la zona de creación albiazul y el club afronta el recién abierto mercado de invierno con el propósito de encontrarle un recambio de garantías. En este sentido, el último nombre que ha salido a la palestra es el del joven jugador del Tenerife Luis Milla, que podría abandonar el equipo isleño por una cantidad cercana al millón de euros. - T.S.