Vitoria - Aunque finalmente las pruebas médicas descartaron que Tomás Pina sufriese la lesión de mayor gravedad que se podía esperar con alguna afección en los ligamentos de la rodilla, la fractura de peroné que padece el centrocampista de Villarta de San Juan ya es de por sí un problema de enorme relevancia para un Deportivo Alavés que se quedará durante alrededor de cuatro meses -hasta mediados de abril si se cumplen los plazos de recuperación estimados por los servicios médicos del club, con solo un mes de competición más por delante, después de pasar por el quirófano esta misma semana- sin su gran referente en el eje del campo y que está obligado a tomar decisiones inmediatas para cubrir semejante hueco.

De momento, durante este mes de diciembre y en los tres partidos que quedan por delante para que se cierre el año deportivo, Asier Garitano cuenta con tres centrocampistas (Manu García, Pere Pons y Mubarak Wakaso) en los que ha depositado su confianza en distintos grados y con otros dos más (Dani Torres y Javi Muñoz) que ni siquiera se han estrenado en lo que va de curso. El problema es que de este quinteto el único que cuenta con unas características parecidas a Pina como pivote posicional de corte defensivo es el colombiano, relegado al ostracismo y del que se esperaba prescindir en el próximo mercado invernal para ahorrar su ficha en los últimos meses que le quedan ya de contrato.

Para el inminente e importante duelo contra el Leganés, el preparador de Bergara no tiene apenas donde elegir si hay que atenerse a lo visto hasta ahora. Con Wakaso sancionado tras su expulsión en Granada, Manu y Pons se perfilan como titulares, aunque seguramente Torres o Javi Muñoz tendrán que entrar en la citación para contar con alternativas en el banquillo. Estos dos futbolistas, que ni siquiera se han estrenado en partido oficial esta temporada, tendrán seguramente su oportunidad en la visita a Jaén del próximo martes para disputar la primera eliminatoria copera, mientras que antes del parón navideño solo quedaría la visita al Barcelona, ya con el centrocampista ghanés recuperado.

En el corto plazo las soluciones tienen que ser obligatoriamente internas, pero a medio parece obligado recurrir a un mercado en el que el Alavés, antes de la lesión de Pina, no tenía previsto moverse demasiado. El mediocentro de Villarta de San Juan se va a perder alrededor de cuatro meses de competición -si se cumplen los plazos previstos de cuatro meses, volvería a estar disponible a partir de mediados de abril para afrontar las siete últimas jornadas ligueras, por lo que se perdería quince hasta entonces- y Garitano precisa otro pivote posicional y de corte defensivo de ciertas garantías y que llegue a aportar al equipo desde el primer minuto. - DNA