Vitoria - El Alavés B viaja hoy hacia Cádiz donde mañana se medirá al filial cadista en el partido de vuelta de la segunda ronda del play-off (El Rosal, 12.00 horas) con el objetivo de levantar el 0-2 del domingo pasado en Ibaia. Compleja papeleta la que tiene por delante la escuadra de Igor Oca en su objetivo de ascender de categoría. No va más para una escuadra, la albiazul, que no puede especular con el marcador y desde el inicio debe mostrar otra cara bien distinta a la que enseñó ante sus aficionados el pasado fin de semana. Evitar los errores defensivos, algo poco habitual de un conjunto vitoriano que se ha mostrado sólido durante la temporada regular, pero que ante los amarillos naufragó por completo en los primeros diez minutos de encuentro, es el gran objetivo. El filial tiene que mostrar en ataque también más fluidez, sobre todo en la zona de remate, si quiere sorprender a los andaluces. En la ida apenas entró en juego Valero y Fuentes estuvo francamente desasistido. Paulino fue quien lo intentó algo más, pero las ayudas de la defensa cadista fueron constantes y el cántabro acabó perdiéndose en protestas a la vez que desquiciado. Poco ritmo en la salida de balón propició que el Cádiz B controlara el choque a su antojo. “Esperamos a un muy buen rival pero estamos muy concienciados de a lo que vamos”, admite Igor Oca. Con la duda hasta última hora de Dani Iglesias, habrá que ver si el preparador vizcaíno repite el mismo once titular que jugó el domingo anterior o si por el contrario da entrada, por ejemplo, a Arzuaga, un jugador que podría aportar más velocidad a la salida del balón. - M. Uriarte
