Vitoria. El partido contra el Amorebieta le sirvió a Óscar Rubio para certificar su continuidad durante una temporada más en la disciplina del Deportivo Alavés. El del sábado suponía el trigésimo partido liguero en el que el lateral derecho ilerdense disputaba un mínimo de 45 minutos, por lo que tras su renovación el pasado verano la cláusula existente en su contrato le asegura una nueva campaña de vinculación con la entidad del Paseo de Cervantes, en la que se está convirtiendo en todo un referente por su omnipresente presencia sobre el terreno de juego.
No en vano, Rubio acumula todos los minutos oficiales de la presente temporada con la única excepción de los 58 en los que se quedó en el banquillo en la visita a Torrelavega, donde disputó los 32 restantes hasta el final de un partido que viene a unirse a los otros treinta y cinco compromisos oficiales completos -uno de ellos con prórroga- que ha disputado entre Liga y Copa. En total, el catalán acumula 3.212 minutos a lo largo del presente curso y amenaza con seguir jugándolo todo hasta que Natxo González se decida a darle un descanso o hasta que reciba una quinta tarjeta amarilla por la que lleva nueve partidos, desde que vio la cuarta en la visita al Real Unión a finales de enero, amenazado de suspensión.
Además, si a los treinta y seis partidos en los que ha tenido minutos a lo largo del presente curso de manera consecutiva se unen los veintiséis seguidos con los que cerró la anterior campaña, las cifras del ilerdense se vuelven abrumadoras. En total, Rubio acumula sesenta y dos partidos encadenados jugando y en todos esos compromisos solo se ha perdido los citados 58 minutos en Torrelavega y otros 31 más tras ser cambiado la pasada temporada en la visita al Salamanca. Es decir, en el equivalente a temporada y media de competición no ha llegado a perderse ni los noventa minutos de un partido entero.
La renovación del lateral derecho tras cumplir la cláusula de disputar al menos 45 minutos en un mínimo de partidos es la primera que se produce, pero no será la última. El siguiente caso es, además, inminente, ya que Jaume se encuentra a las puertas de cumplir esa treintena de compromisos ligueros. Así las cosas, el mediocentro catalán se ganará la continuidad en Vitoria durante una temporada más si el próximo domingo es de la partida en el duelo contra el Lleida, situación más que probable.