Son las 20.00 horas del 27 de abril y suena la primera llamada a la fiesta desde la balconada del Ayuntamiento. Una hora más tarde, se realizará el segundo acto desde la balconada del Palacio de la Provincia donde los toques sonarán cuatro veces más. Todo ello simboliza, según las personas expertas, los toques de queda que tenían lugar antiguamente en aquellos lugares amurallados, como era el caso de la capital alavesa hace siglos. Esta teoría añade además, que en los días de fiesta, los atabaleros y trompeteros se veían obligados a tocar más de una vez porque la ciudadanía que disfrutaba de la juerga hacían caso omiso a este sonido al estar entretenida con la jarana. Sin embargo, hay quien cree que se trata de una llamada a la fiesta que originariamente realizaban las tropas recorriendo las calles. Esta teoría encaja con el ambiente que se vive cada año en el 27 y 28 de abril en Álava. Tras la retreta tiene lugar la Tamborrada, que parte de la torre de Doña Otxanda a las 23.30 y llega a la Plaza de la Provincia media hora más tarde. Allí, quienes participan interpretan alrededor de ocho composiciones.

Pero para que esto suceda, hace falta ensayar. Durante los meses de marzo y abril el Iradier Arena ha sido testigo de los avances de los grupos de mayores y pequeños que recorrerán las calles la víspera de San Prudencio y el día del patrón, respectivamente. Tambores, cantineras y majorettes han ensayado por separado, pero en el ensayo general del domingo 24 de abril lo hicieron todos juntos. Pese a que, junto con la Diputación, la directora de la Tamborrada, Leire Betolaza, hizo un llamamiento para conseguir un gran volumen de chavales y chavalas, este año menos de 100 se han animado a tomar parte. En las gradas, padres, madres y abuelos/as observan cómo apuran el último ensayo en el que no falta la música de Ezberdinak y Paul Rodríguez ejerce de Tambor Mayor. Izaskun Belakortu y Begoña Gómez recuerdan los pasos a las majorettes, cantineras y aguadoras y al acabar el ensayo hay quien les deja claro a las niñas que acudan a la cita del día 28 sin maquillar.

Mientras los/as más pequeños van abandonando el coso gasteiztarra, Xabier Moraza y quienes siguen sus instrucciones en la banda de música se ponen manos a la obra con el almuerzo. Hay que reponer fuerzas para el ensayo con los/as mayores. En total saldrán unas 150 personas con bombos, tambores, barriles y barriletes. También habrá 6 aguadoras, 10 cantineras y 17 majorettes. José Ángel Sobrón ejercerá de Tambor mayor. Sobre las 13.00 se acaba el ensayo. Ya queda menos para ver si los ensayos dan el resultado esperado.

Unas 150 personas participarán en la Tamborrada adulta de hoy mientras que mañana, en la infantil, no llegarán al centenar

Tambores, cantineras y 'majorettes' han ensayado por separado en el Iradier Arena y el 24 de abril se juntaron para realizar el ensayo general