El senegalés Abba (Aboubacry) Kane, en sustitución de Iker Miranda, con una sonrisa de oreja a oreja, se ha estrenado este miércoles en el Pleno de las Juntas Generales como el primer procurador negro en la historia de la Cámara de Álava. Lo ha hecho en representación del PSE. Un partido que desde siempre le llamó. Cuenta que cuando estudiaba Filología Hispánica en la Universidad Cheikh Anta Diop, de Dakar, ya seguía los discursos de Felipe González. En enero de 2000, este profesor de Lengua y Literatura en Senegal aterrizó en Madrid como becario de la Agencia Española de Cooperación Internacional y poco después, empezó a participar en actos de apoyo a José Luis Rodríguez Zapatero. En cuanto obtuvo la nacionalidad, se afilió. Ya en Vitoria, como representante de la Asociación Africana-Euskadi, empezaron sus primeros contactos con Cristina González, secretaria general del PSE alavés, quien le propuso formar parte de las listas en las últimas elecciones.
En primer lugar, enhorabuena. ¿Hasta qué punto veía cercano entrar algún día en las Juntas?
–Muchas gracias. La verdad es que ha sido una sorpresa. Yo no esperaba entrar en esta legislatura, pero Cristina me dijo que seguro que vas a estar, pero yo, sinceramente, no me lo esperaba, de modo que además de ser una sorpresa agradable, ha sido un honor. Y no solo para mí, sino para toda la comunidad inmigrante, sobre todo para la africana.
¿Considera que con su elección va a haber más diversidad en las instituciones alavesas?
–Clarísimo. Esto es algo concreto. Ha tomado una foto con una persona de un color distinto y eso ya es diversidad. Pero más allá de eso, las ideas y argumentos y todas las cosas que se analicen, necesariamente tomarán en cuenta las preocupaciones de los inmigrantes y esto me parece importante porque estamos en una sociedad vasca, que siempre ha sido abierta. Una preocupación que es una realidad, sobre todo, en el caso del partido socialista.
En las entrevistas que ha concedido estos días ha afirmado que había inmigrantes que no querían votar porque no se consideraban representados.
–Efectivamente. Cuando me pusieron en listas, y estábamos en campaña, estuvimos por muchos pueblos y contactamos con muchos hermanos y hermanas de origen africano y cuando les explicaba el proyecto y les decía que iba en el número 12, me explicaron que tenían sus reservas. Que ellos nunca habían votado porque no se sentían integrados en la política. Así de sencillo me lo decían. Desde entonces, hemos tenido muchas reuniones con grupos de inmigrantes de diversos países y como saben que tienen delante ya a alguien que tiene ese compromiso con ellos, creen que es un motivo de apertura real. Así que en las elecciones europeas a las que vamos esperemos que muchos se animen a votar.
Sin embargo, no solo quiere representar a inmigrantes, sino a todos los alaveses.
–Soy juntero y eso significa ser representante de toda la ciudadanía de Álava, de modo que defenderé todo lo que pueda todo lo positivo que vea para ella.
¿Cómo se ha sentido recibido en las Juntas Generales?
–Muy bien desde el principio, empezando por el grupo juntero socialista, donde me recibió particularmente bien su portavoz, Josu (López Ubierna), aunque por todos, en general. Me explicaron muchísimas cosas y también hoy (por ayer) antes del estreno, Josu me ha acompañado y me ha dicho dónde me tenía que sentar, cómo hay que votar... Unos guías muy buenos que me han facilitado todo.
¿Igual de bien le han tratado el resto de formaciones?
–Sí, también. Me han recibido muy bien. He tenido muchos saludos y abrazos por parte de todos. Ha sido realmente una muy buena acogida.
¿Es cierto eso de que en cuanto obtuvo la nacionalidad, se afilió al PSE?
–Sí. Estudiando Filología Hispánica en Dakar seguía los discursos de Felipe González, que entonces era el presidente del Gobierno. Empecé a notar que se reflejaban mis ideas y desde entonces, empecé a seguir al PSOE. En cuanto tuve la nacionalidad, me afilié. No tenía ninguna duda.
Su primer voto ha ido contra la paralización del futuro centro de refugiados de Vitoria.
–Sí, fue también por el orden de acontecimientos, lo que hizo que mi primer voto fuera para que no se paralizara. Ha sido un día realmente de felicidad y como me siento representando también a otros inmigrantes, mi felicidad es extrema.
¿Nos puede avanzar qué otros retos tiene como juntero?
–Es acercarme cada vez más a los colectivos migrantes, para conocer sus preocupaciones y problemas, pero también a toda la ciudadanía alavesa. Conozco el interior de Álava, pero intentaré profundizar mucho más para defenderla todo lo que pueda con los compañeros a través de propuestas y mociones. Agradezco a todos los que con sus votos me han permitido entrar. Aprovecho también para hacer un llamamiento a los inmigrantes, para que tengan un mayor compromiso político, porque tienen derecho al voto y tienen que expresar su voto a través de él y participen de manera significativa en esta sociedad de la que son parte.