Recientemente, la plataforma empresarial y logística de Arasur, en el término municipal de Ribabellosa, vendió la mayor parcela preparada para usos económicos en el Norte del Estado. En total 27 hectáreas, 270.000 metros cuadrados.

El comprador es una firma privada con la intención de usar el terreno con fines industriales o logísticos. La operación, sujeta a las preceptivas cláusulas de confidencialidad propias de un contrato de estas características, da salida a la parcela de mayores dimensiones del Norte de España preparada para acoger actividades económicas. 

Parcela XXL

En el argot del sector logístico, a este tipo de solar de más de 100.000 metros cuadrados se le denomina XXL. Se trata de un terreno de 270.000 metros cuadrados, 27 hectáreas, ubicado en un nodo de comunicaciones principal en el Norte del Estado.

Lo es tanto por sus facilidades para exportar e importar mercancías a través de las carreteras A-1 y AP-68, de ferrocarriles con el nudo de Miranda de Ebro a apenas un par de kilómetros e, incluso, de aviones con la cercanía de Foronda, terminal carguera por excelencia; y de barcos gracias a la conexión directa que tiene Arasur con el Puerto de Bilbao a través de un tren de mercancías semanal que recorre las instalaciones propias y ajenas de Pancorbo, Arasur y Jundiz para el trasiego de todo tipo de mercancías.

El solar en cuestión ha sido (y es) objeto de obras para su adecuación y comunicaciones con el resto de calles del polígono y accesos a las principales vías de comunicación. Esos trabajos han contado con un presupuesto de alrededor de cuatro millones de euros. 

En cualquier caso y según desveló entonces el director gerente de Araba Logística, matriz de Arasur, Peio Ruiz, en conversación con DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, el comprador de la parcela es un fondo de inversión que utilizará el solar para facilitar la implantación en ella de la actividad empresarial “que le resulte más rentable”. En estos momentos, estaría abierto el proceso de negociaciones llamadas a cerrar el acuerdo con el nuevo o nuevos inquilinos.

Dada la especial ubicación de este polígono empresarial, la parcela podría atraer a un polo logístico global con la intención de dar salida desde Ribabellosa a productos o servicios en el norte del Estado, o pabellones de servicio y suministro de grandes superficies o una actividad industrial señera, muy al estilo de otras firmas que ya operan desde Arasur, como Gestamp, Bridgestone o DSV. 

El éxito de Arasur

En cualquier caso, la adquisición del solar, único en su especie en el Norte del Estado, y solo comparable a superficies ubicadas en Madrid y Barcelona u otras zonas de fortísima implantación industrial, pone de manifiesto el éxito que tiene Arasur, que roza el 100% de ocupación.

De hecho, en estos momentos, tal y como recordaba Ruiz, solo quedan tres parcelas libres junto a las instalaciones del puerto seco del Puerto de Bilbao. De ellas, una está comprometida y las otras dos apenas aportan 40.000 metros cuadrados para atraer nuevos proyectos empresariales, según indicó Ruiz. 

Oferta colmatada

Del resto, de lo que está construido, la superficie de casi 100.000 metros cuadrados de pabellones está totalmente colmatada con diferentes propuestas logísticas y empresariales que han visto en este área el lugar idóneo para producir y comunicarse con el resto del mundo.

Todo ello ha llevado a la dirección de este polo industrial y logístico a evaluar la posibilidad de ampliar Arasur, aunque se es consciente de la dificultad que ello impone.

En cualquier caso, el director gerente ya avanza la realización de estudios preliminares para contemplar hipotéticas ampliaciones.

La adquisición de esta parcela es un caso único en el tejido empresarial del territorio histórico, ya que éste adolece de ese tipo de solares capacitados para atraer grandes proyectos industriales o logísticos. 

Suelo industrial

De hecho, tal carencia ya ha protagonizado discursos de gestores políticos del territorio, que se han hecho eco de las dificultades existentes para contar con grandes solares y para resolver los trámites urbanísticos, excesivamente garantistas, inherentes a ese tipo de cuestiones urbanísticas y que acostumbran a dilatar en el tiempo varios años cualquier tipo de operación.

En este punto, no han sido pocas las voces que han pedido cierta visión de futuro al respecto para anticiparse a las necesidades de las industrias y de proyectos empresariales de gran calado.