Las fiestas de Dulantzi avanzan a buen ritmo y pese al paso de las horas las ganas de diversión no decaen. Los vecinos, sobre todo los más txikis demostraron que saben disfrutar y se subieron al tren de la fiesta.

Si el sábado fueron los blusas veteranos y los jubilados los protagonistas indiscutibles de las fiestas, ayer la jornada tuvo como principales artífices a los más pequeños, sobre todo a primera hora de la mañana. Mientras algunos apuraban las horas en la cama y los más trasnochadores se resistían a dar por concluida la juerga, los más pequeños de la localidad se acercaban hasta el la plaza para disfrutar de la juerga.

Romería de Aiala

La tranquilidad fue la nota dominante durante la mayor parte de la tarde a la espera de la celebración del día de la Romería de Aiala, especialmente dedicada a los más pequeños, ya que, en las inmediaciones de la ermita románica del siglo XIII, podrán saltar en el hinchable, aunque la cata de zurracapote con pintxo y los juegos de mesa animarán a los mayores a sumergirse en la fiesta. El deporte rural familiar también tendrá cabida en la jornada más familiar de las fiestas. Los asistentes podrán reponer fuerzas para bailar con el grupo Galea con la chocolatada popular que servirán las chicas de Zatorrak. La localidad descansará hasta que se retomen los festejos el próximo viernes para la octava de fiestas.



Txaranga

La txaranga Izenbarekuak fue la encarga de llamar a la fiesta con su paseíllo musical por las principales calles de la localidad. A mediodía dio comienzo en la plaza de toros portátil el V Día de la vaca brava de Euskadi que se inició con el concurso de anillas. Mientras los más valientes competían en la plaza, la iglesia de la localidad acogía el oficio religioso y la txaranga Izenbarekuak ponía música en las calles de la villa.

Los más madrugadores también tuvieron la oportunidad de subirse al tren festivo que recorrió las principales calles de la villa. Todo un viaje de diversión para grandes y pequeños que no dudaron en hacer cola pacientemente.

Mezcla de gentes

Para esa hora del mediodía las calles de la localidad se fueron animando a medio día. Blusas txikis y jóvenes se entremezclaban con los mayores de la localidad que salían ya de la misa mayor en la iglesia de San Blas para honrar a la Virgen de Aiala, patrona de la localidad.

Mientras los más pequeños se subían al tren de la fiesta, los cortadores de tronco demostraron su destreza con el hacha, así como los levantadores de fardos y yunque.

La saga Perurena

La Herriko plaza se convirtió en escenario de la exhibición de deporte rural en el que participaron entre otros Kimetz Alzola, Asier Pellejero e Inazio Perurena. Harrijasotzailes, levantamiento de fardos, yunque o corte de tronco fueron algunas de las disciplinas ofrecidas bajo un sol abrasador.

En otra de las plazas de la localidad, la 8 de Marzo, el grupo de música local The Artichokes, reunía a sus fans en un concierto de promoción de la creación artística y cultural de la localidad.

Poteo ineludible

Madrugadores y gaupaseros recorrían las calles del Casco Viejo de la localidad para realizar el tradicional poteo antes de reponer fuerzas para una tarde en la que el paseíllo de los blusas y neskas de las cuadrillas Zatorrak, Aitxoak, Iratxoak, Zentzugabeak y Follón-Formales, el concurso de obstáculos, el pintxo-pote con barredora hinchable y pintacaras, la música, y la obligada visita a las barracas fueron las protagonistas.