Siguiendo la tendencia estatal, en Álava durante el año 2022 se produjeron 527 rupturas matrimoniales, lo que, en comparación con las 546 de 2021, supuso una disminución del 3,6% respecto al año anterior, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). De esta forma, el territorio vuelve a la tendencia bajista que inició en 2016, cuando se alcanzó el techo como 678 rupturas, y que solo se rompió con motivo de la excepcionalidad que supuso el incremento en 2021 con respecto a un 2002 en el que los registros se redujeron drásticamente con 465 disoluciones, la cifra más baja de la serie de datos que arranca en 2013.
Respecto a esas 527 rupturas matrimoniales de 2022, de las que 20 fueron entre personas del mismo sexo, la mayoría fueron divorcios, con 516 frente a los 529 del año anterior, mientras que el resto fueron separaciones, con un total de 11, frente a las 17 de 2021, y con ningún caso de nulidad, como viene ocurriendo desde el año 2013, que es el último que aparece en esta serie del INE.
Sin separación previa
En la mayoría de los divorcios que se produjeron el pasado año en Álava no existía separación previa (483) y también en la mayor parte de los casos fueron por mutuo acuerdo (458), cifra que supuso 23 más que los de 2021, frente a los que terminaron en un proceso contencioso (58), puesto que ahora es más difícil llegar a juicio por ello, si se tiene en cuenta que no solo los letrados intentan llegar a un acuerdo previo, sino que también el Ministerio Fiscal, en el momento del pleito, incluso el propio juez, intentan solucionar el asunto de forma amistosa.
En cuanto al tiempo que llevaban casados, entre los divorciados predominan los que llevaban diez o más años casados (321), seguidos de los que llevan de 2 a 9 años (180) ya que tan solo 15 decidieron poner fin cuando llevaban menos de dos años desde que se dieron el sí quiero.
En relación a los hijos de estas parejas, de los 516 divorcios que se firmaron en Álava en 2022, casi la mitad no tenía hijos dependientes (516), frente a los 277 que sí que tuvieron descendencia. Entre estos últimos, los que más hubo fueron los que tenían dos o más hijos dependientes (168), seguido de un hijo menor (93) y 16 tenían un hijo mayor dependiente.
La custodia de los hijos entre los cónyuges de diferente sexo recayó en su mayoría en la madre (95). Si bien hubo muchos casos de custodia compartida (147) y entre los que no procedió ejercer la custodia (259).
En la mitad de los divorcios de diferente sexo no procedió pagar la pensión alimenticia (231), seguida de la que recayó entre ambos cónyuges (154). Y cuando recayó en uno de los progenitores en concreto, fue el padre (119) el que la tuvo que asumir, frente a los tres casos en los que se tuvo que encargar la madre.
En cuanto a las edades de los cónyuges de diferente sexo, entre ellos predomina la franja de 45 a 64 años (282), seguida de la de 25 a 44 años (185), ya que solo un menor de 24 años se divorció en 2022 en Álava. La tercera horquilla más numerosa fue la de la tercera edad, con 38 rupturas entre los de 65 años y más.
En relación a la edad de las esposas, también las que más deciden formalizar la ruptura matrimonial entran en el grupo de edad de 45 a 64 años (273), seguidas de las de 25 a 44 años (211), con 18 casos entre las que tienen 65 años y más y únicamente cuatro casos entre menores de 24 años.
Y cuando se trata de divorcios entre diferentes sexo, son ellas las que presentan la demanda en el doble de los casos (61 en comparación con las 32 que iniciaron ellos). No obstante, ambos cónyuges acordaron iniciar el procedimiento en 413 casos de los 507.
Huelga de letrados
En el primer trimestre de 2023, el número de demandas en el Estado de disoluciones matrimoniales, nulidades, separaciones y divorcios, en total 22.647, disminuyó un 10,3% respecto al mismo trimestre de 2022, según los datos recogidos por el Servicio de Estadística del Consejo General del Poder Judicial. Una tendencia que también se trasladó a Euskadi, donde hubo 875 demandas frente a las 995 del mismo trimestre del pasado año (16,6% menos).
La huelga de los letrados de la Administración de Justicia, que se prolongó desde el 23 de enero del hasta el 28 de marzo, tuvo un impacto en la resolución de asuntos y también en el ingreso, puesto que el número de procedimientos repartidos que quedaron pendientes de ser aceptados por los órganos judiciales, y por tanto no se computaron como ingresados, creció “enormemente” en el primer trimestre de 2023.
Por comunidades, el mayor número de demandas de disolución por cada 100.000 habitantes se dio en Canarias, con una ratio de 65,4; Navarra, con 56,4 y Comunidad Valenciana. Por el contrario, las tasas más bajas se dieron en La Rioja, con 30,7; Madrid, con 37,3; Castilla y León, con 37,9; y Euskadi, 39,4.
Al detalle
2022. Siguiendo la tendencia estatal, en Álava durante el año 2022 se produjeron 527 rupturas matrimoniales –la tercera cifra más baja desde que hay registros en 2013–, en comparación con las 546 de 2021, lo que supuso una disminución del 3,6% respecto al año anterior, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). De esta forma, el territorio recupera la tendencia a la baja que mantenía desde 2016 y que se rompió en 2021 (546) tras un 2020 marcado por una bajada muy importante propiciada por la pandemia del coronavirus (465). En el año de 2016 es en el que más procedimientos se han contabilizado (678) en la última década.
Tipo de ruptura matrimonial. Respecto a esas 527 rupturas matrimoniales de 2022, de los que 20 fueron entre personas del mismo sexo, la mayoría fueron divorcios, con 516 frente a los 529 del año anterior, mientras que el resto fueron separaciones, con un total de 11, frente a las 17 de 2021, y con ningún caso de nulidad, como viene ocurriendo desde el año 2013, que es el último que aparece en esta serie.
Tiempo que llevaban casados. En cuanto al tiempo que llevaban casados, entre los divorciados, predominan los que llevaban diez o más años casados (321), seguidos de los que llevan de 2 a 9 años (180) ya que tan solo 15 decidieron ponerlo fin cuando llevaban menos de dos años desde que se dieron el sí quiero.
Descendencia. De los 516 divorcios que se firmaron en Álava en 2022, casi la mitad no tenía hijos dependientes (516), frente a los 277 que sí que tuvieron descendencia. Entre estos últimos, los que más hubo fueron los que tenían dos o más hijos dependientes (168), seguido de un hijo menor (93) y 16 tenían a un hijo mayor dependiente.
Pensiones. En la mitad de los divorcios de diferente sexo, no procedió pagar la pensión alimenticia (231), seguida de la que recayó entre ambos cónyuges (154). Y cuando recayó en uno de los progenitores en concreto, fue el padre (119) el que la tuvo que asumir, frente a los tres casos de los que se tuvo que encargar la madre.
La cifra
527 disoluciones matrimoniales. Son las que se produjeron en Álava el año pasado. La mayoría de ellas (516) fueron divorcios y el resto (11) separaciones.