La iniciativa Lurraren defentsan, Euskal Herria Bizirik registró ayer 4.000 alegaciones al Plan Territorial Sectorial (PTS) de Energías Renovables, en las que piden al Gobierno Vasco su desestimación y exigen la paralización de los proyectos de centrales eólicas y grandes polígonos solares en tramitación.

Esta plataforma engloba a vecinos, asociaciones y ayuntamientos que consideran que el PTS ignora aspectos relevantes relativos al impacto ambiental y que choca con los objetivos establecidos en las Directrices de Ordenación del Territorio, los planeamientos municipales y los PTP comarcales. El colectivo aseguró en una nota que el elevado número de alegaciones muestra la “amplia respuesta social” a este documento, que se resume en la petición de su desestimación porque el modelo que plantea “beneficia a los intereses de las grandes empresas energéticas y fondos de inversión a costa de ocasionar importantes impactos territoriales, sociales y ambientales”.

En las alegaciones se señala que este plan “sacrifica el territorio” y se alerta de que no se han puesto a disposición pública los informes emitidos en fase de consultas previas por las administraciones implicadas, así como que hay una “insuficiente definición” de los emplazamientos y una “deficiente” información cartográfica.

Estas cuestiones, a juicio de la plataforma, “invalidan plenamente la tramitación de este plan” por tratarse de reservas de terreno que “pretenden imponerse a los municipios sin tener apoyo técnico ni justificación suficiente”. Las alegaciones destacan además que el PTS es “incompatible” con las normativas de protección de espacios naturales y de especies silvestres y con la preservación de la biodiversidad y de los corredores ecológicos.

La plataforma rechaza los modelos energéticos centralizados, apuesta por los basados en la generación distribuida con renovables para autoconsumo a escala local, y defiende medidas de reducción del consumo.