Álava amaneció ayer por segundo día consecutivo bajo un manto blanco de nieve que pronto da paso a una débil lluvia. Amanece con puertos de montaña cerrados al tráfico: Opakua, Vitoria, Herrera, Orduña, Aiurdin, Bernedo y Zaldiaran. Y otros en los que se necesitan cadenas para circular, caso de Azazeta, Altute, Barrerilla y Kruzeta. Igualmente está prohibido a primera hora el tránsito de camiones y articulados en la A1 a su paso por Armiñón.
De madrugada, un vehículo se sale de la calzada en la carretera A-627 en sentido Arlaban, en el municipio de Arratzua-Ubarrundia; como consecuencia del accidente, una persona herida ha sido evacuada al hospital de Txagorritxu. Problemas puntuales para circular se dan también en la N-622 a la altura de Murgia y en Sarria, un autobús de la línea Izarra-Vitoria se queda bloqueado. En algunos pequeños pueblos de la Llanada se ha suspendido el transporte escolar y en la estación de Agurain, 17 pasajeros del tren de las 9.38 horas se quedan en tierra debido a una incidencia en el servicio de Renfe. “Y autobuses no hay hasta las 10.45 horas, si es que van”, comenta un usuario en Twitter. Y en el campus alavés se posponen exámenes.
Además, los servicios de emergencia informan de 22 incidencias en Álava atendidas desde el miércoles por la noche hasta ayer por la mañana por hielo y nieve y dan cuenta de cinco intervenciones por desprendimientos y caídas de árboles.
En todo caso, pequeñas incidencias para una primera nevada invernal que toca a su fin y da paso al frío y a la lluvia. No obstante, la Diputación Foral de Álava mantiene desplegados 53 operarios, 21 equipos materiales y cinco patrullas de miñones para garantizar la circulación por la red viaria.
Ahora, los servicios de emergencia ponen el foco en el nivel de agua de los ríos ante la posibilidad de que se desborden los cauces, lo que en Álava parece poco probable de momento, ya que las precipitaciones serán escasas hoy viernes, según Euskalmet.
Apunta la Agencia vasca de Meteorología que sólo lloverá de manera débil y ocasional; las temperaturas seguirán siendo frías; las máximas bajarán un par de grados y la cota de nieve subirá a 800-1.000 metros. En Vitoria se espera una mínima de 0º y una máxima de 5º y en Laguardia, entre 1 y 5 grados.
Heladas
El ambiente seguirá siendo muy frío mañana sábado, jornada durante la que el termómetro no pasará de los cuatro grados en Gasteiz y soplará cierzo en el Valle del Ebro. Ya por la noche, la cota de nieve volverá a caer a 300-400 metros, aunque, como mucho, se acumularán dos centímetros de nieve a 600 metros y hasta cinco a mil metros, informa el Gobierno Vasco. En Álava, helará.
Mencionar que durante las últimas horas han caído unos ocho centímetros más de nieve, que han dejado espesores de diez y hasta quince centímetros, según la zona. También ha hecho mella la nevada en los embalses; en tres días, Ullibarri ha pasado del 57% al 61% de capacidad y Urrunaga está al 65% frente al 55% del pasado domingo; con todo, el pantano tiene todavía margen suficiente para almacenar más agua.
En Vitoria, los copos caídos durante la madrugada del miércoles al jueves dejan un espesor de más de diez centímetros de nieve sobre los bancos y coches que han dormido en la calle. A primera hora, la ciudad tirita de frío a un grado, pero despierta con sus calles totalmente transitables y sin apenas incidencias, salvo algún patinazo que otro a medida que la nieve se derrite. El transporte público funciona con normalidad. El peligro está ahora en los resbalones y en la caída de bloques de nieve desde tejados y cornisas.
