La estación meteorológica ubicada en el pueblo alavés de Navarrete, en el municipio de Bernedo, registró la madrugada del miércoles al jueves la temperatura más baja de Euskadi durante una noche que se anticipaba especialmente gélida en el territorio alavés.

El pequeño pueblo alavés, con apenas 40 habitantes, marcó una temperatura mínima de 2,8 grados bajo cero, según la información facilitada por Euskalmet. A pocos grados se quedó la estación meteorológica de Iturrieta, con 2,4 grados bajo cero.

Los -1,8 grados en Campezo, -1,5 grados en Agurain y Arkaute y los -0,4 grados en Abetxuko dejaron también a estos puntos alaveses prácticamente congelados.

Tras las heladas, que se mezclaron con bancos de niebla, la Dirección de Atención de Emergencias y Meteorología del Gobierno Vasco ha dado este jueves por finalizado el aviso amarillo por riesgos de temperaturas mínimas y heladas.