La calle Prado está de estreno con la apertura del bar Belardi, a la altura del número 5. Esta nueva propuesta que aterriza en la céntrica calle es la apuesta personal de dos hosteleros, Melissa Sancho Sánchez y Sebastián Marín Justo, que deciden emprender su propia carrera después de muchos años de experiencia al otro lado de la barra en otros conocidos locales de Vitoria.

Apuesta por el ambiente diurno y el tardeo

El Belardi número 5 llega como una nueva alternativa más para "dinamizar la calle" y convertirse en un punto de referencia con su apuesta por la "coctelería clásica para el verano con bebidas como los tradicionales Daikiri, Margarita o los Smoothy para quienes no toman alcohol", explica Sebas en pleno ajetreo para tener todo a punto antes de recibir a los primeros clientes.

Su gran apuesta, al igual que el espíritu del local es dar un "buen empujón al ambiente diurno y afianzar el tardeo" explica el hostelero, como consecuencia de los hábitos impuestos por una pandemia ya en retirada. Abanderando ese espíritu renovador en las estanterías de estilo industrial del Belardi 5 hay una amplia variedad y repertorio de vermut.

Vermut casero

"Tenemos una carta muy amplia de vermús y contamos también con nuestra propia creación de vermut", remarca Melissa. Se trata de una bebida única creada por los propios gestores del Belardi 5 y es una "mezcla de licores, aunque todo está ya inventado y animamos a la gente a que se acerque y lo pruebe", desliza Sebastián para su nueva clientela.

Una gilda de creación propia

Nada mejor que acompañar esa variada gama de vermut con un bocado tan singular como la gilda. Este pintxo es otra de las estrellas del nuevo Belardi 5 y, al igual que sucede con el licor, Melissa y Sebastián animan a probarlas sin ofrecer más detalles sobre los ingredientes que lleva. "Va a sorprender", deslizan a modo de enigmática y escueta pista.

Quienes accedan al nuevo local se van a encontrar con una barra también repleta de pintxos como otro de los elementos que van a definir al nuevo local de la calle Prado. Para los fines de semana no faltarán las "rabas, croquetas, pintxos fríos, también queremos introducir el pulpo y una vez ya establecidos algún tipo de tabla de quesos", como elementos de picoteo.

Desayunos desde las 7.30 horas

La especial ubicación del local, junto a las paradas de muchas de las líneas de autobús que recorren la ciudad les lleva también a señalar su preferencia por "trabajar todo lo referido a los desayunos" abriendo a las 7.30 de la mañana.

"Estamos en una buena calle, con elevado paso de gente y muy cerca de la Virgen Blanca", enmarca Melissa, que señala también la importancia de la ruta que se genera en la calle Prado con el resto de negocios hosteleros ya en marcha.

Estilo industrial en la decoración

El nuevo Belardi 5 ya estaba enfocado a la hostelería con los gestores anteriores. Cuando Melissa y Sebastián empezaron a buscar la manera de labrarse su propia carrera "enseguida se nos presentó este local" y no dudaron ni un segundo en preparar su desembarco, conscientes ambos de que querían continuar su trayectoria "en el centro de Vitoria y no salir a los nuevos barrios".

El cambio ha sido profundo en el local que hasta hace unos meses fue La Taska del Waska. Los tonos amarillos y las plaquetas en la barra, han dejado paso a un diseño y estilo industrial, con los tonos oscuros de las mesas metálicas laterales, el ladrillo en una de las paredes, colores negros en el frontal de la barra y las rejas metálicas de las estanterías", describe Melissa.