La Semana Santa ha vuelto a ser la que era, a tenor del balance que hacen a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, empresas del sector, como hoteles, guías turísticos, además de las tiendas y bares que se han animado a abrir la persiana.
En el Hotel Dato (Dato, 28. Vitoria), por ejemplo, están más que satisfechos de estos días festivos. “Hemos tenido una ocupación del 100%. Estamos en niveles de antes de la pandemia en Semana Santa”, resalta su gerente, Iñigo Bastarrika.
Sus clientes han sido, sobre todo, familias y matrimonios que les han llegado desde Madrid, Comunidad Valenciana y Cataluña. “Y el único cambio que hemos notado es que ha habido más reservas de última hora”, matiza.
En el caso del Jardines de Uleta Suites (Uleta, 1. Vitoria), el viernes y sábado rondaron un 90-95% de ocupación, así que les ha ido mejor de lo previsto. “Se concentra todo entre viernes y sábado, pero como habitualmente. Nos hemos quedado cerquita de llenar, pero aunque no lo hemos hecho, el precio medio ha subido (+25%), siendo superior al de Semanas Santas anteriores, por todos los incrementos y porque el precio de los hoteles va en función de la demanda. La Semana Santa ha sido muy positiva”, precisan.
Respecto a la procedencia de sus clientes, ha sido la habitual, “mucho de Cataluña, por ejemplo, y mucha habitación familiar”.
Bien también en bares
Estas buenas sensaciones también las comparte Elena Martín, presidenta de SEA Hostelería y directora a su vez del Jardines de Uleta. “La Semana Santa ha ido bastante bien. Ha habido bastante buena ocupación, aunque haya sido a última hora, porque no han dado buen tiempo hasta casi al final”, explica. En cuanto a los bares y restaurantes, también ha notado que la gente se ha movido. “En Vitoria se ha quedado bastante gente y han acudido a nuestros establecimientos hosteleros”. Aparte también han venido de “Madrid, Barcelona y Valencia, pero extranjeros, muy poquitos”.
En cuanto al gasto de medio, en los hoteles no ha habido problemas en este sentido “porque ha sido similar a 2019 y en hostelería también”. Es por eso que “merece la pena abrir en Semana Santa. Cuantas más cosas haya abiertas, mejor”.
En el bar-restaurante Erkiaga (Herrería, 38), unos de los 155 comercios asociados a Gasteiz On abiertos en estas vacaciones, les ha ido “muy bien por el tiempo y por los turistas que nos han llegado de Huesca, Canarias, Madrid, Barcelona, Galicia, Asturias, Bizkaia, Gipuzkoa y País Vasco francés. Lo que más nos han pedido son pintxos de barra. Que haya más Semanas Santas como estas”, solicita Josune Menéndez.
En el caso de Elaia Moda (Postas, 16), otro de los 155 comercios de Gasteiz On que abrió en Semana Santa, el año que viene también tienen claro que lo harán: “Hemos estado abiertos todos los días, menos el domingo. El sábado, que fue laborable, fue muy bueno y el jueves y viernes, normal. Ha entrado bastante turista de Euskadi y del resto de comunidades, aunque en mi calle ha habido pocos abiertos”, declara.
En el comercio Guereñu (General Loma), especializado en regalos y souvenirs, “ha habido ambiente porque el tiempo lo ha favorecido y se ha trabajado bien”. Igualmente, han tenido mucho turismo nacional y sus productos más demandados han sido los naipes Fournier y las camisetas de Kukuxumusu, como detalla Mikel López de Guereñu.
En gimnasios
La llegada de visitantes también la han notado en gimnasios como Altafit, con dos centros en San Prudencio y Los Herrán. “Nos han venido socios de otras ciudades como Madrid y Asturias. Hemos abierto todos los días”, señala Esmeralda Ramírez, directora de Altafit.
Pablo Ochoa, presidente de la Asociación Comercio Vitoria, que agrupa a más de 300 establecimientos, y responsable de la tienda de cuentas Lakú (Virgen Blanca, 10), también opina que merece trabajar en Semana Santa: “Abro por varias razones: por la venta y por la promoción de la tienda, puesto que vendemos también online y así la gente conoce la marca, y para que la actividad tenga un pulso normal, pero las instituciones son las primeras que tienen que dar ejemplo”.
Ochoa también ha notado afluencia de visitantes, “porque nuestra tienda es céntrica. Normalmente, eran de Cataluña, Madrid y resto del País Vasco”.
Rutas guiadas
“A tope” también han estado empresas como Guiartu, que se dedica a hacer rutas en bici y a pie por la ciudad. “La Semana Santa ha ido muy bien. A principios de año entraban reservas pero con cautela por la variante Ómicron y luego, por la guerra de Ucrania y la subida del carburante, sí que notamos que no entraban, pero al final, se desmadró”, cuenta Arturo Martínez.
Ya lo empezaron a intuir a partir del 4 de abril, “cuando comenzamos a recibir bastantes. Y al final, hemos tenido más que en 2019 tanto para las rutas a pie como en bici. Andamos entre un 8-10% más respecto a la Semana Santa de 2019. Hay días que he hecho cuatro tours y la sensación entre mis compañeros es la misma y desde el Ayuntamiento también porque había colas en la oficina de turismo”.
Lo que sí que han notado es que muchos no pernoctan en Vitoria, sino que se acercan desde Logroño, Bilbao o desde casas rurales de los alrededores de Vitoria. “Es gente que viene a echar el día”, apunta. En concreto, desde el pasado día 4 y hasta el Jueves Santo recibían a muchos madrileños y luego a catalanes, valencianos y hasta sevillanos, por los vuelos de Foronda.