El tsunami de contagios provocado por esta sexta ola está dejando unos registros imposibles de imaginar a priori. Especialmente, en lo poco que va de año 2022.
Álava, que hace apenas tres meses parecía tocar con la punta de los dedos la ansiada normalidad, ha acumulado durante las tres últimas semanas la friolera de 27.363 nuevos casos de coronavirus, que representan el 36,2% de los 75.519 positivos detectados durante toda la pandemia en el territorio. En definitiva, al patógeno le han bastado solo 21 días para pasar de los 48.156 contagios que había provocado en Álava hasta el pasado 26 de diciembre -tras un año y diez meses de crisis sanitaria- a esos 75.519 que alcanzó anteayer domingo.
Así se desprende del mapa covid actualizado ayer por el Departamento vasco de Salud, que eleva nada menos que a 137.125 los nuevos positivos detectados en Euskadi en los últimos 14 días, las dos semanas con más positivos de toda la pandemia. También, en lo que respecta a Álava. El fortísimo repunte comenzó en la provincia en la semana comprendida entre los pasados 27 de diciembre y 2 de enero, cuando Álava acumuló 7.612 contagios que prácticamente duplicaron los registrados durante los siete días previos.
La siguiente semana, la del 3 al 9 de enero, el territorio alcanzó su -hasta ahora- récord de toda la crisis sanitaria, con un total de 9.885 positivos. La del 4 de enero fue -también hasta ahora- la jornada con más positivos de la pandemia, con un total de 2.042.
Por último, los test diagnósticos han hecho aflorar entre los pasados lunes 10 y anteayer 9.866 infecciones más. Y eso que, tras el último cambio en los protocolos, ahora son menos las pruebas que Osakidetza realiza y, por ende, los contagios que se contabilizan. Con todo, la media de positivos diarios registrados en el territorio ha ascendido en estas últimas tres semanas hasta los 1.303.
El HUA, tensionado
Las cifras demuestran que la alta tasa de vacunación ha evitado males muchísimo mayores a nivel local, pero tras semejante explosión de contagios la situación en el Hospital Universitario Araba (HUA) es a día de hoy, como en el conjunto de la CAV, complicada.
Fuentes de la OSI Araba destacaron ayer a este periódico que la presión hospitalaria "ha bajado algo, pero nada reseñable" en el complejo gasteiztarra, que sigue registrando "bastante ocupación" de camas por parte de pacientes covid.
Cabe recordar que ayer se inauguró la nueva UCI del edificio de servicios generales de Txagorritxu, a donde la OSI Araba va a trasladar entre ayer y hoy a todos los pacientes covid y no covid desde la UCI antigua.
Sin embargo, esta última seguirá operativa mientras la situación epidemiológica así lo requiera.