Exigir el certificado covid para entrar en los locales de ocio es una medida que causa incertidumbre y diferentes opiniones entre los hosteleros alaveses. Actualmente, esta medida ya se está implantando en ciertos países de Europa, como en Francia, Reino Unido, Grecia, o Irlanda, e incluso en el Estado español, en Galicia, ya se ha comenzado a pedir pruebas covid para entrar en los locales de hostelería. DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA ha hablado con varios hosteleros de la ciudad para conocer la opinión del sector sobre esta medida que podría entrar en vigor en la Comunidad Autónoma Vasca si los casos de contagio continuaran en aumento.

"Me parece una medida que podríamos aceptar los hosteleros, siempre y cuando fuera la última para comprobar y demostrar que la hostelería no es responsable de este aumento de casos de coronavirus en el territorio alavés", explica Mario, miembro del local Apolo, ubicado en la calle San Francisco. Añade, además, que podría ser una buena medida también para atajar los casos de coronavirus en la ciudad y para acabar con el registro de clientes que entran en los locales.

"Creo que la hostelería es la más machacada en esta pandemia, y con este nuevo repunte de casos lo va a seguir siendo. Si implementar la medida del certificado covid ayuda a que terminemos con el registro a los clientes o a que no nos hagan cerrar, me parece buena medida", dice y añade: "Si, por el contrario, no va a ser más que una medida más, me parece entonces seguir mareando y golpeando de lleno a la hostelería".

Además, y en este mismo sentido, Mario asegura que le puede llegar a parecer una medida correcta, aunque incoherente, el hecho de que solo se exijan estas medidas para los locales de ocio de hostelería y no, en cambio, para "ir de tiendas o viajar en el transporte público".

Una opinión muy similar y que también comparte Nico, del bar El Siete, ubicado en la calle Cuchillería. "Los hosteleros estamos haciendo todo nuestro esfuerzo por salir adelante, por hacer todo nuestro trabajo lo mejor posible, por evitar más contagios en la ciudad y poder seguir trabajando sin que nos cierren los locales. Me parece una buena medida pedir el certificado de vacunación covid, incluso, es más, diría que deberíamos llevarlo todos colgado del cuello y así sabemos quién está vacunado", sentencia. Pero, pregunta: "¿Es solo una medida que se va a aplicar en la hostelería? Eso no lo entiendo, y no entiendo el por qué. Si esto se implanta en nuestros locales, se debería exigir también para montar en el tranvía, en los autobuses, para ir al hospital y también de compras. No solo hay que exigirnos a nosotros".

Por ello, también asegura que siente que este sector está siendo "duramente castigado" y mira con incertidumbre y miedo el avance y aumento de contagios en las últimas semanas en el territorio alavés. Asegura, de hecho, que temen que el Gobierno Vasco vuelva a implementar "duras" restricciones al sector de la hostelería -tras las últimas medidas adoptadas por el LABI, en los interiores el aforo ya se ha rebajad al 35 %-, y vuelvan a pagar así "las restricciones más fuertes" para atajar los contagios.

"Parece que nadie se da cuenta, o no quieren ser conscientes, pero desde el inicio de la pandemia la hostelería está siendo sacrificada. Venimos a trabajar y lo único que queremos es precisamente eso, que nos dejen trabajar. Somos los primeros que estamos pendientes de que se cumplan las normas, pero es importante que no se sigan metiendo solo con nuestro sector", opina.

Rechazo

Desde el local Jango Taberna, Juan se muestra más cansado. Rechaza con rotundidad la idea de tener que pedir el certificado covid a sus clientes y asegura que bastante hace realizando el registro de las personas que acuden a su local "como para encima tener que llegar a eso": El rechazo que le genera esta idea no viene derivado del trabajo que esto supone, sino porque considera que los hosteleros ya han hecho lo "suficiente" para demostrar que "la hostelería no es culpable de la pandemia".

Por ello, cansado y asqueado de la situación y de que este sector esté en el punto de mira constantemente, asegura que "para seguir dándonos este tipo de órdenes, lo mejor es que a los hosteleros nos conviertan en funcionarios y así son jefes de todos los bares". Insiste, por ello, en que "cada local es responsable de que se hagan cumplir las leyes, pero que no solo las implanten para la hostelería, porque ya se ha demostrado que los contagios no ocurren aquí".

Opinión similar la de Leonardo, del local Gautxo. Para él esta medida podría ser positiva la idea inicial de pedir el certificado covid no le causa rechazo. Sin embargo, la ve ineficaz si no va acompañada de otras medidas e incluso de una vacunación "más rápida". "En Euskadi todavía un gran número de la población no esta protegida ya que no se les ha administrado la segunda dosis de la vacuna. Estas medidas que se centran en la hostelería me parecen correctas para protegernos a nosotros mismos y a los clientes, pero creo que otras medidas de contención vendrían antes que esa; por ejemplo, la de tener vacunada a toda la población", opina.

Por último, desde un local cercano al de Leonardo, uno de los camareros, que prefiere mantenerse en el anonimato, asegura que desde su local siguen de cerca y con preocupación el avance de los casos de coronavirus y muestra indignación. "Me parece indignante todo lo que están haciendo. El mero hecho de hacer un registro y apuntar en un papel todas las personas que vienen a comer, anotar su número de teléfono, nombre y apellidos y guardarlos durante tres semanas nos da muchísimo trabajo. Pero de eso nadie se da cuenta. Y lo hacemos por mantener el control de la pandemia, pero es excesivo que ahora vayamos a pagar nuevamente las consecuencias del aumento del coronavirus", concluye.