- Desde la plataforma Dikerik Ez, que aglutina a los concejos contrarios al proyecto del VIAP y que cuenta con el respaldo de diferentes agentes sociales y partidos del territorio, se insiste en que el parque industrial no podrá construirse tal y como está diseñado hasta que no se resuelva el recurso interpuesto contra el mismo en el ámbito contencioso-administrativo.
“Se debería esperar a la decisión de los juzgados antes de dar por hecho el inicio de ninguna obra, ya que la sentencia podría echarla atrás o cambiarla, con el perjuicio que eso supondría para las arcas públicas y para los contribuyentes”, argumentaban en la plataforma ya en 2019.
Además, Dikerik Ez recordó en su día que la resolución de la Confederación Hidrográfica del Ebro que da vía libre a la reforma de la A-3302, estrechamente ligada al proyecto del aeropuerto, condiciona la obra a que se lleve a cabo “un programa de seguimiento de los episodios de avenida para corroborar el funcionamiento previsto y la ausencia de nuevas afecciones”.
El proyecto prevé ensanchar un puente sobre el río de diez a treinta metros con el fin de evitar taponamientos y con ellos las inundaciones. Según la plataforma, un estudio de ese tipo debería prolongarse incluso durante una década, y de cumplir la obra con su cometido, aseguran, no sería necesario construir el dique.
La plataforma acusa a las instituciones, por otro lado, de incurrir en un delito de prevaricación, bajo el argumento de que la Agencia Vasca del Agua (URA) instaba a la construcción del dique para proteger al aeropuerto de Foronda, mientras que diversos responsables institucionales vinculaban esta obra directamente con el VIAP, y no con el aeródromo.