- La junta directiva y coordinación de la Comisión ciudadana antisida de Álava negó ayer categóricamente que las personas que trabajan en dos de los centros municipales que gestiona, Aterpe y Estrada, hayan estado en una situación de "desprotección" frente al coronovarirus, tal y como denunció anteayer públicamente el comité de empresa de Sidálava. A través de un comunicado, la entidad defendió que ha cumplido "con todas y cada una de las indicaciones" recibidas desde el Ayuntamiento en materia de seguridad e higiene, así como con "los protocolos oportunos" para garantizar la seguridad de sus trabajadores y usuarios.
Sidálava detalló que las personas responsables de estos servicios disponen desde el pasado 28 de febrero de "información preventiva y la competencia propia de su responsabilidad para dotar al recurso" de los materiales necesarios. La propia junta directiva y coordinación verificó en su día que "así era", como también lo comprobaron el domingo, "ante la publicación en prensa de que los servicios no contaban con los artículos de higiene y prevención más elementales", la responsable municipal de Inclusión y el jefe de recursos de acogida del Ayuntamiento. Ambos, según la junta de Sidálava, "acreditaron que la Comisión había cumplido escrupulosamente con sus indicaciones, existiendo en los recursos los carteles informativos recibidos con consejos preventivos, así como jabón, gel desinfectante, papel desechable y mascarillas".
En respuesta a la denuncia del comité de que en los centros no hay espacios para poder llevar a cabo una "intervención segura" y ajustada a los protocolos de seguridad, la junta recordó que medidas como el respeto del metro y medio de distancia entre las personas fueron anunciadas por el lehendakari Urkullu en la noche del sábado "para ser efectivas a partir del domingo a las 00.00 horas". El comité hizo pública esta situación horas después, "no dando ni el más mínimo margen de reacción" a la entidad y al Ayuntamiento para reorganizar los servicios. Fuentes municipales confirmaron ayer que parte de estos usuarios van a ser trasladados a la antigua mini residencia municipal Arquillos para, entre otras cosas, respetar las distancias de seguridad establecidas.
"Queremos dejar meridianamente claro que las publicaciones del comité de empresa son totalmente falsas, intentando desprestigiar más de 30 años de labor humana y profesional", insistió la junta, que advirtió de que estas afirmaciones "han puesto en serio peligro la continuidad laboral de las plantillas de dichos servicios". También, que tomará "las medidas pertinentes ante dichas descalificaciones y falsedades". / Foto:
