vitoria - En su empeño por ofrecer nuevas y mejores alternativas terapéuticas para sus pacientes, muchas de ellas de carácter innovador, el Hospital Psiquiátrico de Álava vuelve a estar de estreno. El centro gasteiztarra va a poner en marcha en los próximos días una pionera sala de confort sensorial, que como su propio nombre indica está equipada con numerosos elementos destinados a inducir a la relajación, y permite afrontar así de manera saludable las situaciones de estrés y agitación. En el caso concreto del hospital, que atiende a personas con trastorno mental grave, la sala trata de fomentar un entorno terapéutico positivo y flexible, que dotará a los profesionales de una nueva herramienta para abordar el cuidado en situaciones de crisis. En definitiva, para ayudar al propio paciente a reconocer sus estados emocionales y proporcionarle instrumentos que le enseñen a controlarlos.
Decorado en tonos suaves y con motivos inspirados en la naturaleza, el espacio dispone de un sofá reclinable, una mecedora, un puf, un difusor de cromoterapia, un proyector para disfrutar de relajantes vídeos, un difusor de aromaterapia, musicoterapia, mantas ponderara -con peso-, pelotas anti estrés, revistas, libros, balones suaves, cojines... La sala, primera que estrena el Psiquiátrico, se encuentra en el área de Rehabilitación funcional 1 del centro, que atiende a pacientes con trastorno mental de larga duración, muchos de edad avanzada. Será el avance de otros espacios de las mismas características que ya están proyectados en el resto de áreas del hospital, como la de Rehabilitación intensiva 1, que también empezará a funcionar en un breve plazo de tiempo. DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA ha tenido la oportunidad de conocer el recurso de primera mano.
Mariola Olalde, supervisora del área de Rehabilitación funcional del centro, ha desempeñado un papel clave en la puesta en marcha de la sala de confort sensorial. La especialista ha devorado bibliografía sobre experiencias similares en otras partes del mundo para acumular evidencia científica, ya que no existe un espacio similar en redes de salud mental de todo el Estado, y observa con ilusión todas las posibilidades que se abren ahora, al alcance de las decenas de profesionales de un centro por el que sólo en 2019 pasaron 318 pacientes en total. De este primer espacio se beneficiarán alrededor de 50. "Se trata de manejar esas situaciones de crisis, pero también de empoderar al paciente para que, cuando reciba el alta, sepa también responder a ellas fuera", expone. Acompaña a Olalde en su encuentro con este periódico Eguzkine de Miguel, gerente de la Red de salud mental de Álava (RSMA), que destaca el carácter "humanizador" de este recurso, en la línea de otras acciones impulsadas en el seno del hospital para convertirlo en un espacio más amable. También Flora Murua, directora de enfermería de la RSMA, que pone en valor el "trabajo en común" de todo el personal del hospital, sanitario y no sanitario, así como el de los propios pacientes, para la implantación del recurso. "Se ha elegido el mobiliario, los vinilos y hasta el suelo con ellos, recogiendo sus gustos", apunta de nuevo Olalde.
El punto de partida para la creación de la sala de confort fue la puesta en marcha de un grupo de trabajo con representación de todas las áreas y categorías profesionales del Psiquiátrico. A ello siguió una revisión bibliográfica con intercambio de documentos en inglés, francés y castellano, un trabajo de campo que también incluyó encuentros con los profesionales del Hospital General Universitario Santa Lucía de Cartagena, el primero de todo el Estado en contar con un espacio de estas características. Su equipamiento se ha prolongado durante las últimas semanas y comenzará a dar servicio coincidiendo con la ya inminente entrada en el mes de marzo. El hospital ha elaborado también una guía para que cualquier profesional sepa utilizar la sala correctamente, aunque en líneas generales se hará "cuando el paciente lo necesite o el profesional lo vea necesario", según Olalde.
individualizado El Psiquiátrico, que tiene en su ADN prestar una atención integral y centrada en cada paciente, va a imprimir también a la sala de confort sensorial ese modelo de tratamiento individualizado. Para ello, cada potencial usuario cuenta ya con una ficha personal de su perfil sensorial, que refleja sus preferencias sobre las diferentes alternativas de uso de la sala, lo cual supone también en sí mismo otro aspecto innovador. "El paciente tiene que ser una de las partes más importantes de su plan terapéutico. Llevamos ya muchos años trabajando en esta línea, no siendo paternalistas", justifica Murua. De ahí que serán ellos mismos quienes orienten a los profesionales cuando llegue el momento de utilizar la sala de confort.
Varios estudios certifican que estas herramientas aumentan la calma y el autocontrol de las personas con trastorno mental grave, lo cual mejora a su vez sus relaciones interpersonales. Un aprendizaje que, a priori, les beneficiará y podrán poner en práctica posteriormente en su entorno habitual. Con todo, y con el objetivo de sacar chispas a esta experiencia, el centro va a llevar a cabo un estudio amplio para medir varios parámetros sobre el uso y eficacia de la sala cuyos primeros resultados se esperan para marzo del próximo 2021.
El centro hospitalario gasteiztarra, en definitiva, trata de facilitar lo que ha venido a denominar alianza terapéutica, que pasa por brindar oportunidades de participación a sus propios pacientes en estrategias de prevención y reducción de crisis. "Debemos tener en cuenta las opiniones de las personas con trastorno mental, asesorarles y ayudarles a elegir las alternativas terapéuticas más adecuadas en cada momento concreto. Esto permite que el paciente pueda empoderarse y ser parte activa de su recuperación, ayudándole y orientándole a explorar diferentes estrategias mediante las cuales relajarse y afrontar de manera saludable el estrés, reduciendo así el estado de agitación al que llegan en muchas ocasiones", detalla una pequeña memoria explicativa del proyecto.
Fichas personales. El Hospital Psiquiátrico de Álava, que tiene en su ADN prestar una atención integral y centrada en cada paciente, va a imprimir también a la sala de confort sensorial que abrirá sus puertas en los próximos días ese modelo de tratamiento individualizado. Para ello, cada paciente del centro cuenta ya con una ficha personal de su perfil sensorial, que refleja sus preferencias sobre las diferentes alternativas de uso de la sala, lo cual supone también en sí mismo otro aspecto innovador.