Vitoria - Un día después de que el Gobierno Vasco anunciara a las familias de Aldaialde que hay una opción para acelerar los trabajos del colegio haciéndola en dos fases, tras descartar sus servicios jurídicos que las obras puedan acometerse con la licencia condicionada del Ayuntamiento, las madres y padres retomaron sus protestas porque de momento, como dicen, solo tienen "buenas palabras". Por esta razón, ayer decidieron "hacer más ruido" mediante una caravana reivindicativa, la cual se pudo ver en un vídeo en la edición online de ayer de DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, en la que participaron varias decenas de vehículos.
Al grito de Gure eskola nahi dugu, la hilera de coches partió a las 14.30 horas de Reina Sofía para poner rumbo a la sede del ejecutivo vasco, donde dieron tres vueltas. Tras ello, se dirigieron a la parcela de Borinbizkarra, donde se pretende levantar la escuela, con el fin de colocar una pancarta y desde allí partieron a la ubicación actual del centro, donde a las 16.30 horas, celebraron una fiesta con actividades para toda la familia.
"entiendo a las familias" Por su parte, el alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran, calificó ayer como "una buena noticia" que el Gobierno Vasco estudie la posibilidad de acelerar las obras del colegio en términos similares a los planteados en su momento por el propio Consistorio gasteiztarra.
"Las familias de Aldaialde tienen toda la razón a la hora de exigir que sus hijos estudien en un centro educativo en condiciones dignas. Como padre que soy lo entiendo perfectamente", aseguró ayer el primer edil en una rueda de prensa en la que, a preguntas de los periodistas, se mostró "satisfecho" con los avances en el futuro de este colegio vitoriano.