Artziniega - Hoy es último domingo de febrero y, como cada año, tras su ausencia de 2019 motivada por el cierre temporal que atravesó la infraestructura mientras las instituciones debatían su modo de financiación, la asociación Artea de Artziniega, ayudada por artesanos y vecinos, hará que el museo etnográfico que gestiona desde 1984 cobre vida. Será entre las 11.00 y las 14.00 horas cuando los visitantes podrán ver en funcionamiento los 1.700 metros cuadrados, distribuidos en 17 amplias salas, que configuran este espacio, como si el tiempo se hubiera parado en los años 30 del siglo pasado, y “el museo se hubiera convertido en un pueblo de hace 80 o cien años”, señala Mateo Lafragua desde Artea. Tilda la iniciativa como “una fantástica oportunidad de conocer el modo de vida preindustrial que nos retrotrae al de nuestros antepasados. Aquellos tiempos en los que no estaba acuñado el término ecologismo pero tampoco generábamos basura, porque todo se aprovechaba”.
Y es que, en este ya tradicional y exitoso día en vivo, que alcanza su décimo primera edición, artesanos y personas que mejor conocen los modos de vida de antaño se acercan a las distintas secciones del museo y se ponen a trabajar en ellas, dando la oportunidad de conocer de cerca profesiones, oficios y formas de vida y trabajo perdidos en el tiempo y que forman parte de nuestra memoria reciente, tales como apicultores, tejedores, costureras, carpinteros, alpargateros, herreros, molineros o boticarios en cuyo laboratorio trasero al despacho elaboraban remedios naturales y ungüentos, por citar alguno; aunque “el oficio invitado de este año será el de cestero”, adelanta.
Desde Azpeitia En concreto, se trata de José Luis Etxeberria, de Azpeitia, uno de los últimos cesteros que quedan en Euskadi, que demostrará sus habilidades y responderá todas las preguntas de los asistentes en torno a este ancestral oficio en peligro de extinción. Y es que, aunque hoy día hay cursos de artesanías entre los que se encuentra la cestería, la realidad es que como oficio está condenado a desaparecer por su escasa o nula rentabilidad. “Antes no había bolsas de plástico y los cestos eran imprescindibles para ir a hacer compras al mercado o transportar leña, manzanas o setas. Se iba al monte en busca del material con el que trabajar (castaños), hoy se trae de fuera, y solo vendemos en fin de año y ferias como la del mercado de antaño en Artziniega. No se puede vivir de ello y no hay relevo”, asegura Etxeberria. En este sentido, su presencia “servirá de homenaje a los pocos cesteros que hay en la actualidad y para todos los que se dedicaron a este noble e imprescindible oficio hace unos años”, subrayan desde Artea. Junto a él también estarán el baserritarra explicando la cosecha, el barbero cortando el pelo en directo y la etxekoandre preparando un caldo para degustar.
A las personas que acudan hoy a este “museo vivo” se las aconseja, además, no dejar de pasar por la sala de exposiciones temporales del espacio. Y es que Artziniega museoa esta albergando, desde el pasado mes de diciembre y hasta el 1 de marzo, una muestra consistente en juguetes antiguos de los años 40 a los 80. “Hemos querido poner el tope en 1980 porque supuso la llegada de la electrónica, de aquellos primeros ordenadores o computadoras que tenían una capacidad de 32 k. Menos de lo que ocupa hoy cualquier imagen mala y sencilla que podamos captar con un teléfono móvil”.
Calmado de tráfico
No a los resaltos en carreteras
Mateo Lafragua. El vecino de Artziniega Mateo Lafragua no ceja en su lucha contra los resaltos por sus consecuencias “negativas” para los conductores, pasajeros y vehículos. Ha mantenido una reunión con el diputado de Infraestructuras, Javier Hurtado, quien “se ha reafirmado en el compromiso de su departamento de no utilizar resaltos como elementos de calmado del tráfico en carreteras de Álava”, informa. Lafragua fue premio Ciudadano ponle freno 2018 por el estudio y el vídeo La repercusión de los resaltos en las emergencias sanitarias. “Hablamos del despropósito de los resaltos como elementos de calmado por las graves consecuencias”, subrayó tras su encuentro con el diputado.