Vitoria - Una campaña recordará desde hoy la importancia de depositar los medicamentos caducados o que ya no se usan en los 832 puntos que hay en las farmacias vascas. Sigre, entidad sin ánimo de lucro en la que participan agentes del sector farmacéutico, lanza esta iniciativa con el objetivo de garantizar el correcto tratamiento medioambiental de los residuos de envases, vacíos o con restos de medicamentos, que se generan en los hogares.

Con el lema Di sí al medio ambiente, di sí a Sigre, la campaña, en la que se anima a los ciudadanos a depositar estos envases en los 113 de los denominados puntos Sigre que hay en Álava, además de 436 en Bizkaia y 283 en Gipuzkoa. También se hincapié en el uso adecuado de los antibióticos y el necesario cumplimiento de los tratamientos con estos medicamentos.

El director general de Sigre, Juan Carlos Mampaso, recuerda que “la organización mundial de la salud y las autoridades sanitarias ya han alertado del grave problema de salud pública que suponen las resistencias bacterianas”, de ahí la importancia de ser “especialmente cuidadosos” cuando se tiran los antibióticos. Además, advierte de que el 48% de los pacientes, al finalizar o abandonar un tratamiento con antibióticos, guarda los restos de medicación en el botiquín de casa, con el consiguiente riesgo derivado de una automedicación inadecuada.

Desde Sigre recuerdan que el botiquín no debe ser “un almacén de medicamentos” y sólo debe contener aquellos prescritos para las enfermedades que padezcan los miembros de la familia y los necesarios para atender afecciones leves: analgésicos, antitérmicos, antiinflamatorios, para picaduras o quemaduras, así como materiales de cura, tijeras, pinzas, termómetros o desinfectantes para heridas.

Además, hay que revisarlo un par de veces al año para retirar los medicamentos caducados y los que ya no se necesitan para llevarlos con su caja a un punto Sigre. - Efe