Vitoria - Desde el Bapo!, de la avenida Zabalgana, pasando por el Makila, de la avenida Reina Sofía, siguiendo por el café Sola, de Martín Luther King, para acabar en el OM, de la calle Oion, no sin antes hacer una paradita en Dublín House, del paseo de la Unesco. Posibilidades hay muchas porque la primera ruta del ‘vermutazo’, que se hará mañana en Zabalgana, la integran doce locales hosteleros quienes repetirán esta iniciativa todos los sábados al mediodía hasta el 21 de diciembre para ofrecer vermús con gildas por 2,50 euros o con pintxo, por un euro más, además de actuaciones musicales y espectáculos de magia.
Se trata de la primera iniciativa que impulsan una treintena de comerciantes, hosteleros y empresas de servicios del barrio quienes se han unido en la plataforma Gasteiz On-Zabalgana, que capitanea el artista Alain Larrein, para dar vida a este distrito al oeste de la capital. “Si funciona esta ruta del vermú, la idea es extenderla a Salburua y Lakua-Arriaga para seguir dinamizando otros barrios”, detalló Larreina, durante la presentación de este evento en la que estuvo acompañado también por la edil de Promoción Económica y Comercio de Vitoria, Maider Etxeberria, quien, como deseó, “ojalá lo podamos convertir en una referencia de ciudad, como el pintxo-pote”.
Más aparcamientos Tras ello, Etxeberria recordó a los comerciantes que todavía está abierto el plazo para solicitar subvenciones para la contratación de actuaciones en locales, además de las que el Ayuntamiento da a asociaciones. Asimismo, la edil afirmó “recoger el guante” para todas las propuestas de mejora que se pueden hacer en Zabalgana. No en vano, como detalló el presidente de Gasteiz On, Diego Martínez de San Vicente, un reciente diagnóstico de la situación del barrio, en el que han colaborado los técnicos de esta agrupación comercial junto con los establecimientos asociados del barrio, ha detectado, tras dos años de trabajo, que las principales necesidades en este distrito pasan por crear más plazas de aparcamientos, por cambiar la carga y descarga, “que habría que revisarlas para ubicarlas junto a los comercios abiertos”. Lo mismo pasa con las aceras anchas, “que no fomentan el tránsito de los vecinos” y con el “desconocimiento” que hay en general de la oferta comercial de Zabalgana. - A. Salazar