Vitoria - El 1 de enero de este recién estrenado año los rocódromos de Vitoria tendrían que haber reabierto. Sin embargo, las puertas que estas instalaciones municipales habilitadas para la escalada tienen en Hegoalde, Ariznabarra y Salburua seguirán por un “tiempo indefinido” cerradas, desde que el Ayuntamiento declaró, el 20 de diciembre, desierto el contrato para su gestión por tercera vez como adelantó DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA. Usuarios y plantilla han decidido pedir explicaciones al Consistorio y una “solución rápida”, con una doble acción que tendrá lugar este martes, a las 12.00 horas. Lo harán, en concreto, interviniendo en la comisión de Deportes, a través del turno popular solicitado por el club de montaña Neskalatzaileak Gasteiz, y con una concentración, a esa misma hora en la Plaza Nueva, tras no compartir las últimas declaraciones de la edil de Deportes, Estíbaliz Canto, cuando compareció para valorar esta situación y ofreció sus disculpas, ”por esta situación desagradable que escapa al control del Ayuntamiento. Salvo que hubiéramos cedido no a derechos laborales ni de seguridad, sino al lucro empresarial”.

Como avanza a este diario Julio Sánchez, abogado del sindicato ESK, y una de las personas que estará presente en esa comisión, lo que en la sesión solicitarán será, fundamentalmente, “una solución rápida al problema, es decir, saber exactamente cuáles son los pasos que se va a dar desde el Ayuntamiento para solventarlo”.

No en vano, a juicio del abogado de ESK, tanto en el último pliego de condiciones como en los otros dos anteriores, el problema siempre es el mismo. “Se supone que están intentando implementar una solución después de mucho pensar en ella, pero lo que no sé es si se han dado cuenta de que lo único que han hecho en estos tres últimos pliegos ha sido repetir el mismo modelo tres veces. Entonces, si repites el mismo modelo tres veces y no consigues una solución, puedes seguir echando balones fuera y seguir pensando que el problema está en la plantilla o en la empresa cooperativa, que no entra a las condiciones que marca el Ayuntamiento de Vitoria”, censura. Dado que no ven mejoría de las condiciones -añade-, también pedirán una explicación más actualizada de dónde se produce esos cambios de las condiciones económicas porque “lo que es en el análisis más objetivo que hemos podido hacer de los números, no la vemos por ningún lado”, considera.

Por ello, solicitarán que les expliquen esas cifras, “porque dicen que han mejorado la rentabilidad del precio por hora en no sé cuánto dinero, pero no está explicada la manera en que lo hacen. Entiendo que tendrá que ver, por un lado, con las horas de apertura y el precio que pone el Ayuntamiento para la gestión, pero claro, ahí hay una variable que a mí se me escapan y no sé si es que juegan con ingresos teóricos, porque al final la empresa que gestione las instalaciones también va a tener beneficios por la propia ventas de entradas o por la organización de cursos, pero no sé hasta qué punto ese ingreso es potencial, porque dependerá de si hay usuarios que utilicen las instalaciones”. De ahí que quieran saber cómo y en qué medida se está valorando eso desde el propio servicio municipal.

En la segunda parte de esa intervención -añade Sánchez-, volverán a sacar la gestión directa como una posible solución intermedia ante cualquier otro paso que se quiera dar. “La propia concejala en una declaración habló de negociado sin publicidad, de concesión administrativa... Por eso, estamos un poco perdidos y no entendemos muy bien cuáles son las soluciones que se van a poner encima de la mesa. Y tampoco entendemos por qué todo eso está condicionado a que se resuelvan o no las impugnaciones que hemos hecho como sindicato y como plantilla cooperativista al pliego anterior”, precisa.

“Quitarnos de en medio” Otro de los que intervendrá en esa comisión municipal será Jaime Otxoa de Alda, trabajador de los rocódromos desde el año 2008 y que el pasado 5 de octubre entró en un expediente de regulación de empleo (ERE). “Lo que pienso es que el Ayuntamiento está jugando tanto con la empresa como con los trabajadores porque está buscando una nueva modalidad de llevar el servicio y lo que quiere es quitarnos de en medio. Las palabras de la concejala han sido poco acertadas diciendo que si pasaba un año nos quitaban la subrogación a los trabajadores, que es lo que entendemos que el Ayuntamiento está intentando hacer, que vaya pasando el tiempo. Así es como lo veo yo”, opina.