“Fueron mujeres muy valientes, que asumían los riesgos que corrían”
"Red Álava. La red de mujeres invisibles" recupera con la voz de sus protagonistas, la historia de esta red clandestina
GAsteiz - “Fueron mujeres muy muy valientes y muy conscientes de los peligros que corrían”. Ane Azkue Zamalloa es la guionista de Red Álava. La red de mujeres invisibles, un proyecto en el que se embarcó de la mano de la productora Baleuko y que, explica, le dio la ocasión de conocer la historia de estas mujeres y de la Red Álava, una historia en clave femenina en la que la militancia política, el espionaje y la solidaridad se dan la mano. DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA ofrece mañana por 12,95 euros -11,50 euros para los suscriptores- con la compra del periódico el libro ilustrado y el documental en formato DVD que recupera la historia de la Red Álava de la mano de esas mujeres invisibles.
“Me pareció una historia apasionante”, la de Bittori Etxeberria, Itziar Mujika, Delia Lauroba y Tere Verdes, piezas clave de la Red Álava. “Estas mujeres empiezan a a hacer la labor que se les atribuía a las mujeres de alguna manera, llevar el bocadillo a sus maridos o a sus novios a las cárceles, lavarles la ropa o escribirles cartas, esa ayuda asistencial. Empieza siendo así, pero cómo van a pensar ellos que unas mujeres van a ser capaces de meter y sacar mensajes como lo hicieron éstas”. Uno de los pilares fundamentales del documental -estrenado en Gasteiz en mayo- son, subraya Azkue, las bobinas de los testimonios que el periodista Eugenio Ibarzabal recogió a finales de los años 70 de tres de ellas -Bittori, Itizar y Delia-, pues Tere había fallecido. “Tuvimos mucha suerte porque pudimos localizar aquellas bobinas en las que Eugenio Ibarzabal grabó la entrevista, teníamos la historia contada de viva voz, un material muy potente que nos ayudó mucho en el documental”. Unas grabaciones que se recuperan en el documental y, continúa Azkue, el realizador tuvo la idea de utilizar ilustraciones para “poner rostro” a esos testimonios y que ahora configuran también el álbum ilustrado, en el que se recogen más de un centenar de estos dibujos.
El documental y el libro recorren así la historia de la Red Álava, que empezó desarrollando una labor de ayuda a los presos para acabar convirtiéndose en una red auténtica red clandestina que llevó a cabo multitud de acciones, desde impedir detenciones a facilitar la huida a perseguidos por la dictadura al suministro de información de toda índole al Gobierno Vasco en el exilio. “Hoy ir de Elizondo a la cárcel del Dueso son unas horas de coche, pero imagínate entonces -relata Azkue-. Que a una mujer de Elizondo de repente le digan tienes que ir a la cárcel Dueso, sacar las condiciones del Pacto de Santoña, volver hasta Baiona y tráermelas y volver a tu actividad militante a tu pueblo, que sabes que estás fichadísima. Fueron mujeres muy muy valientes y muy conscientes de los peligros que corrían y aún así y todo por unos ideales y por una militancia política lo hicieron”. - DNA / Foto: Cedidas