laguardia - Real Sociedad y Campillo, bodega situada en Laguardia y perteneciente al Grupo Faustino, han firmado un acuerdo por el que Campillo se convierte en el vino oficial del equipo txuri urdin para las dos próximas temporadas. Como explicó el presidente de la Real Sociedad, “estamos muy contentos de volver a tener el apoyo de una gran bodega como es Campillo y también del Grupo Faustino, es un honor recuperar el vino Real Sociedad y poder comercializar las dos ediciones especiales de vino Campillo Real Sociedad. Queremos agradecer el apoyo que nos brinda Campillo, vamos a trabajar conjuntamente para obtener acuerdos provechosos para las dos partes y para que nuestros aficionados se sientan satisfechos con este nuevo vino. Brindamos por el acuerdo”, enfatizó Jokin Aperribay. Por su parte, Paco Honrubia, director general de Grupo Faustino, resaltó que la vinculación con la marca y con la ciudad de Donostia han sido claves para alcanzar este acuerdo. “Nos sentimos muy identificados con la historia y los valores del club y esperamos poder alcanzar juntos todas las ambiciosas metas de este acuerdo que está también muy ligado a los nuevos proyectos que está poniendo en marcha el club: su estrategia internacional y el proyecto de ampliación del estadio de Anoeta”, concluyó.

Fruto de este acuerdo se presentan al mercado dos referencias de Campillo: Campillo Crianza y Campillo Blanco fermentado en barrica con unas etiquetas especiales de la Real Sociedad. Ambas presentaciones estarán disponibles tanto en las tiendas oficiales de la Real como en las páginas web del club y de la bodega, y también podrán degustarse en los principales establecimientos de hostelería de Gipuzkoa. Asimismo, se ha editado de cara a estas Navidades un estuche de regalo tematizado que encajará muy bien para los regalos de estas fechas y en especial para los seguidores txuri urdin. Del mismo modo, Bodegas Campillo quiere aprovechar este patrocinio para acercar y dar a conocer las instalaciones de la bodega a todos los aficionados donostiarras. - Pablo J. Pérez