amurrio - Con motivo de su 40 aniversario, el grupo scout Aisia de Amurrio ha organizado dos jornadas de actividades en homenaje a su fundador, Félix Murga (1929-2001). Un sacerdote a quien esta villa ayalesa también le debe la creación de la asociación etnográfica Aztarna, por lo que le ha dedicado una calle con su nombre.
En concreto, hoy jueves los más mayores subirán hasta el hayal de Peñanegra, donde en 2007 colocaron una placa en recuerdo de Félix que reza: La vida nos viene de la raíz; mientras, los más pequeños hasta 12 años se quedarán de hamaiketako en San Roque, donde se realizarán los pasos de rama (lobatos, rangers, pioneros y rutas).
Para el sábado se han preparado juegos de pistas para todas las edades que discurrirán por lugares relacionados con el grupo, con la intención de mostrar su historia; así como trikipoteo, comida y romería. Durante esta jornada también se hará un pequeño acto en recuerdo a Félix ante la placa en su honor ubicada en la céntrica ermita de San Antón. Fue colocada el 13 de octubre de 2012 y en ella se puede leer: El mejor homenaje a Félix es seguir trabajando. Cinco años después continúan haciéndolo. De hecho, a partir de este fin de semana, Amurrio Aisia Eskaut Taldea dará comienzo a la nueva temporada con reuniones semanales y actividades lúdico-recreativas en su sede en la calle Etxegoienbidea y con la mirada puesta en organizar el campamento de invierno. Animan a la participación de la población infantil y juvenil de siete a dieciocho años que estarán atendidos por catorce monitores y monitoras.
Por otro lado, el grupo municipal de EH Bildu de Artziniega ha hecho público su malestar ante la decisión del equipo de gobierno, en manos del PNV, de inaugurar el nuevo gazteleku del municipio “sin haber tenido en cuenta la eliminación de barreras arquitectónicas que han impedido el acceso a usuarios en sillas de ruedas, con la consiguiente y lógica queja”, denuncian.
gazteleku de artziniega El servicio, un punto de encuentro para el ocio de jóvenes de entre 12 y 18 años, abrió sus puertas el pasado 6 de octubre, “dándose la circunstancia no ya solo de que el ascensor no está todavía en funcionamiento, sino de que la acera que rodea al edificio no ha sido adaptada para poder facilitar el acceso al mismo a usuarios o usuarias con problemas de movilidad”, argumentan desde la coalición abertzale. Recuerda, además, que cuando se presentó el proyecto de reforma del viejo ayuntamiento para ser reconvertido en gazteleku, ya advirtió de que la acera que rodea al edificio suponía una barrera arquitectónica cuya adaptación no había sido contemplada en el proyecto. “Una observación que no fue la primera vez que hicimos. Pero ha llegado el día de abrir las puertas del nuevo servicio, y el PNV se ha olvidado de las personas con problemas de movilidad. No entendemos cómo ha podido cometer tal ofensa, como no entendemos que si tampoco el ascensor funcionaba por qué las prisas para abrir”. - A.O.