vitoria - El director de la Agencia Vasca del Agua (URA), Ernesto Martínez de Cabredo, compareció ayer junto a su equipo en las Juntas Generales para trasladar a la Cámara foral los últimos datos sobre la presencia del mejillón cebra en los embalses del territorio alavés. Desde la agencia asumieron que esta peligrosa especie invasora, muy agresiva, es sencillamente “imposible de erradicar” en la actualidad.
“Allá donde está no hay manera de quitarlos”, recordaron. “Le gusta vivir en fangos y sobre todo en tuberías, y acaban por colapsarlas”, incidieron. “La única solución factible para eliminarlos del pantano sería vaciarlo por completo, porque en seco no pueden sobrevivir. Una posibilidad que lógicamente es imposible, porque no tendríamos alternativa para el suministro de agua a los vecinos de Vitoria y Bilbao”, apuntaron desde URA, donde manejan 75.000 euros anuales para la lucha contra esta especie invasora que se ha adueñado de los embalses alaveses desde hace años.
“No podemos decir ni mucho menos que sea un problema que esté controlado. La única posibilidad que tenemos ahora es evitar que el problema crezca y lleguen más. Pero no es un problema que se vaya a resolver en uno o dos años”, admitieron los representantes de la Agencia vasca del Agua ante las formaciones de la Cámara foral.
Oriundo de los mares Negro, Caspio y de Arán, el mejillón cebra -cada ejemplar puede poner hasta dos millones de huevos al año- se extendió con velocidad inusitada por todo el mundo adherido a los cascos de los barcos que navegaban por los canales fluviales. En 2001 se detectó en el Ebro, y posteriormente en Sobrón, antes de extenderse rápidamente a los embalses de Urrunaga y Ullibarri-Gamboa. Desde entonces, los dos están infectados. - D.O.