Vitoria. El escrito de acusación relata que en mayo de 2013 una de las acusadas acudió al domicilio en Llodio (Álava) del presunto estafado en compañía de un bebé y, con la excusa de pedir agua para el niño, consiguió que éste le dejara entrar en su casa donde entabló una conversación que derivó en una relación de beneficencia que se mantuvo hasta agosto de 2014.
Durante este tiempo la mujer, movida por un ánimo de "lucro ilícito" y utilizando el "engaño", consiguió que el hombre le diera dinero en varias entregas por un montante que alcanzó los 14.204 euros.
Esta cuantía, según el Ministerio Público, fue entregada en mano a la acusada, quien le prometió devolverle el dinero. Sin embargo, a día de hoy el hombre solo ha obtenido la devolución de 630 euros.
La presunta estafa no acabó ahí porque en enero de 2014 la hija de la procesada fue también al domicilio de este hombre con un bebé y utilizó la misma excusa de solicitar agua para el niño para lograr que éste le permitiera entrar en su casa.
Al igual que sucedió con la madre, la hija estableció con su víctima una relación de beneficencia y, con el mismo ánimo "ilícito" y utilizando el "engaño", consiguió que hasta agosto de 2014 éste le entregara en mano y por giro postal varios pagos que ascendieron a 14.754 euros.
El Ministerio Público considera que los hechos son constitutivos de un delito continuado de estafa y señala que en una de las procesadas concurre la agravante de reincidencia, ya que tiene una condena por el mismo delito impuesto por un tribunal de Bilbao. Por ello pide para ella cuatro años y medio de cárcel frente a los cuatro años que solicita para la otra de las acusadas.
La Fiscalía solicita asimismo que ambas indemnicen de forma conjunta a su víctima con 26.405 euros por el dinero obtenido ilícitamente y no devuelto.
El juicio por estos hechos tendrá lugar la próxima semana en un juzgado de Vitoria.