vitoria - El Ayuntamiento de Vitoria aprobó ayer por unanimidad contratar la redacción de sendos estudios socio-urbanísticos para poder declarar Zaramaga y Ariznabarra áreas degradadas de la ciudad. Dicha declaración posibilitará que los vecinos puedan obtener ayudas a la rehabilitación del Gobierno Vasco en mayor cuantía. En un consejo anterior de Ensanche 21 ya se hizo lo propio con Coronación y los próximos a sumarse a esta iniciativa son Abetxuko y Adurza. Además, un análisis de estas características permitirá a la sociedad municipal Ensanche 21 disponer de una radiografía social y urbanística completa, inmueble a inmueble, de la que ahora no dispone.
Se trata, en definitiva, de un primer paso para dar respuesta a uno de los proyectos estratégicos del alcalde, Gorka Urtaran, para esta legislatura: la rehabilitación de los viejos barrios de la ciudad, los denominados barrios de oro por su antigüedad, y su paulatina transformación en eco-barrios, una vez que el informe retrate las zonas más necesitadas de ambos barrios.
Pero para conocer la realidad actual de Zaramaga y Ariznabarra conviene retrotraerse a su origen. En concreto, a la época del desarrollo industrial de los años 50 y 60, origen de la morfología urbana del municipio. El proceso de despegue industrial de entonces se tradujo en el caso de Zaramaga en el desarrollo de una serie de polígonos industriales de la primera industrialización de la ciudad: Gamarra-Arriaga (1958), Olarizu (1950-60), Gamarra-Betoño (1956). Vinculados a ellos y con el fin de alojar a la población inmigrante que llegaba a Gasteiz a trabajar en sus fábricas, surgen Zaramaga y Coronación, y los poblados de Ariznabarra, Adurtza y Abetxuko. Se trata de barrios cuya edificación es mayoritariamente anterior a 1980, con edificios de baja calidad constructiva, problemas de accesibilidad a los portales y viviendas, escaso o nulo aislamiento y presencia puntual de patologías y humedades en fachadas. Todo ello unido al actual envejecimiento de la población, el alto nivel relativo de paro y de personas atendidas por servicios sociales, en comparación con el resto de la ciudad, hace que sean considerados zonas vulnerables. Una realidad que urge de una intervención pública para evitar su progresivo deterioro y adecuar sus condiciones socio-económicas, urbanísticas y edificatorias a las del resto de Vitoria.
El barrio de Zaramaga ocupa una superficie total de 67,66 hectáreas en las que reside una población de 11.953 habitantes. Su desarrollo urbanístico surge a partir del Plan Parcial de Zaramaga de 1959, completándose a finales de los 70 con la construcción de 5.200 viviendas en escasamente 20 años. Zaramaga se concibió como un barrio obrero en el que alojar a los trabajadores de los polígonos industriales adyacentes, en los que se instalaron empresas importantes como Forjas Alavesas y Michelin.
El parque residencial actual asciende a 5.642 viviendas, de las que 98% posee más de 30 años y, entre ellas, el 19% del total fueron construidas hace más de 50 años. Se trata de pisos de pequeño tamaño (entre 60 y 70 metros cuadrados), en edificios de cuatro y seis plantas, más un bajo, y sin garaje en más del 80% de los casos. El barrio adolece de problemas de envejecimiento, con una edad media de más de 50 años y un 36% por encima de los 65 años, y de pérdida de población, con una tendencia regresiva. A nivel económico, el valor de la renta percápita de sus habitantes es una de las más bajas de Gasteiz, con un importante porcentaje de desempleo, pese a lo cual existe un fuerte arraigo, implicación y sentimiento de pertenencia al barrio.
Ariznabarra, por su parte, ocupa una superficie total de 39,60 hectáreas con una población de 7.838 habitantes. El parque residencial actual asciende a 3.400 viviendas, de las que el 49% posee más de 30 años y, de ellas, el 21% fue construida hace más de 50 años. Se trata de un barrio heterogéneo, con tipologías y calidades edificatorias muy diferentes, según su fecha de construcción. Ariznabarra surge a partir de los años 50, también para dar respuesta a la necesidad de alojamiento de los trabajadores que venían de fuera. A partir de una planificación inicial de 1955, entre los años 1958 y 1965 se construye la practica totalidad del denominado poblado con más de 600 viviendas. Se trata de edificios de 4 y 5 alturas que albergan pisos de muy pequeño tamaño y carecen de ascensor, garaje y trastero. Casi en el mismo periodo nace otro enclave residencial en Portal de Castilla bajo tipologías edificatorias propias de la posguerra. En los 80 se expande el barrio hasta completar su configuración actual una década después. Las viviendas de esta etapa disponen de mayor tamaño y tienen ascensor, garaje y trastero. Asimismo, los estándares urbanísticos Poco tiene que ver con las zonas más antiguas.
Zaramaga. Superficie: 67,66 hectáreas. Población: 11.953 habitantes. Parque residencial: 5.642 viviendas, el 98% de más de 30 años. Son pisos de 60 y 70 metros cuadrados, en edificios de cuatro y seis plantas, más un bajo, sin garaje más del 80%.
Ariznabarra. Superficie: 39,60 hectáreas. Población: 7.838 habitantes. Parque residencial: 3.400 viviendas, de las que el 49% posee más de 30 años y, de ellas, el 21% fue construida hace más de 50 años.