gasteiz - Enlazar Foronda con Estados Unidos es un anhelo que lleva años encima de la mesa de las instituciones y agentes encargados de impulsar la terminal alavesa. El puntual -y polémico- vuelo que despegó a Nueva York el 3 de octubre de 2014, con pérdidas de 985 euros por cada uno de los cerca de doscientos pasajeros que volaron, fue un primer intento, una prueba que, finalmente, no tuvo reedición en años sucesivos, aunque el deseo de salir desde Vitoria y pisar Nueva York sin necesidad de enlaces nunca se ha esfumado.
Sin embargo, al mismo tiempo que el regreso de los vuelos regulares de la mano de una aerolínea low cost se anticipa cercano, con Ryanair como principal candidata tras el tanteo previo, la posibilidad de que Foronda se convierta en el aeropuerto de entrada al País Vasco desde el continente americano regresa con fuerza, a tenor de las declaraciones que sobrevuelan la terminal durante los últimos días. Incluso a pesar de que AENA asegurara la semana pasada, en palabras del director de los Aeropuertos del Grupo III, Julián Cámara, que conectar Foronda con Estados Unidos no es tan sencillo, “aunque somos conscientes de que las instituciones tienen ese deseo”. El encargado de reavivar la posibilidad de ese enlace Foronda-Estados Unidos fue, curiosamente, el alcalde Bilbao, Juan Mari Aburto, que hace unos días planteaba la posibilidad de “explorar” la oportunidad de que el aeródromo de Gasteiz acogiera dichos vuelos como puerta de entrada a Euskadi, algo que le valió las críticas de grupos municipales de su Consistorio, como Ganemos y el PSE.
Aburto, sin embargo, encontró ayer un contundente aliado en la figura del diputado general de Álava, Ramiro González, muy molesto con el hecho de que ese apoyo de Aburto a Foronda haya causado tanta polémica en determinados sectores vizcaínos y alaveses.
El diputado general, que participó en la nueva edición del Foro de Logística Intermodal Transmodal, criticó el “absoluto aldeanismo” y la “miopía” de aquellos que se oponen a una estrategia conjunta para los aeropuertos vascos.
“Pocas veces se ha visto una apuesta por una estrategia común de los aeropuertos vascos como la que hay ahora, en la que las instituciones vascas tienen una idea clara de lo que quieren y una voluntad de trabajar juntas”, apuntó González. Su homólogo en Bizkaia, el diputado general Unai Rementeria, también tanteó ayer la opción de que Foronda pueda ser el aeropuerto vasco encargado de acoger los vuelos a Estados Unidos, eso sí, en caso de que Loiu no pueda acogerlos. “El vuelo a Nueva York, si se puede, en Bizkaia. Y si no, en Foronda”, señaló Rementeria, que animó a superar la “provincialidad” y defendió que “la complementariedad entre territorios es algo necesario”. El hecho es que, de cualquier forma, la posibilidad de que el aeropuerto de Loiu pueda acoger vuelos transoceánicos como los ansiados a Estados Unidos choca con una realidad: su pista es demasiado corta, cuenta con 2,6 kilómetros, por lo que la terminal debería ampliarla en al menos 600 metros para tal fin, y evitar que los aviones a los que se recurre para este tipo de vuelos tengan problemas en el despegue y aterrizaje.
Eso mientras la pista de aterrizaje de Foronda, de 3,5 kilómetros y que es uno de sus grandes puntos a favor, sería una alfombra para este vuelos. Por eso, el presidente de la Cámara de Comercio, Gregorio Rojo, reivindicaba ayer en el mismo marco logístico la necesidad de “seguir explorando una ruta transoceánica que conecte USA y el País Vasco”, algo en lo que VIA, la sociedad encargada de impulsar Foronda en la que participan, “lleva trabajando desde hace años”. Y es que como explicaron tanto Rojo como Ramiro González y la consejera vasca Ana Oregi, que también participó en el acto, Foronda necesita pasajeros para sobrevivir.
También el cuarto participante en la mesa del foro intermodal, Asier Atutxa, presidente del Puerto de Bilbao, mostraba después a este periódico su apoyo a la propuesta de que Foronda acoja esos vuelos transoceánicos porque “hablamos de hacer país, y si determinados vuelos no vienen a Foronda la alternativa para las compañías no es que vayan a Loiu, sino que directamente no se hagan”.
El presidente de la Cámara también explicó que la actividad carguera de Foronda generó en 2015 24,5 millones de euros del PIB de Euskadi, contribuyendo a mantener 464 empleos. “Foronda es una infraestructura esencial para dar servicio a la industria vasca y alavesa”, recordó.