celebración ‘calidade’. Fue el primer hogar regional que abrió sus puertas en Vitoria. Y de eso hace ya sesenta años. Una cifra demasiada gorda que ayer se celebró por todo lo alto. El centro gallego recibió a los máximos representantes institucionales: el lehendakari, Iñigo Urkullu; el presidente de la Xunta, Alberto Nuñez Feijóo; el diputado general de Álava, Ramiro González; y el alcalde de Gasteiz, Gorka Urtaran. La comitiva visitó la sede, un edificio con bar, restaurante y zona cultural que se encuentra en la calle Gernikako Arbola, al final del barrio de Lakua-Arriaga, junto a las sedes de los centros andaluz y asturiano. A continuación, se procedió a la inauguración de un cruceiro ubicado en los jardines en honor a los emigrantes gallegos de la capital alavesa. A toda esa gente que tuvo que salir de su tierra, como los padres del presidente del centro gallego, Manuel López, para tratar de encontrar un futuro y ahora vive aquí con el corazón partido. Incluso él sigue sintiendo la llamada de la sangre, más fuerte que el DNI, a pesar de que nació en Gasteiz. Precisamente por ese motivo nacieron las casas regionales, porque la gente tenía la necesidad de juntarse, de hablar, de compartir recuerdos. El centro gallego cuenta con 500 asociados, si bien existen alrededor de seis mil personas de la comunidad autónoma con el mejor marisco de España en la ciudad. Y al ambiente que ellos mismos crean está el que aportan todas las personas que, sea cual sea su lugar de origen, acuden para disfrutar de su fantástica gastronomía. Un espacio ‘calidade’ que bien merecía una fiesta. Foto: José Ramón Gómez
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