vitoria - Viajar en tranvía cuesta algo más que hacerlo en urbano. Y no se oyen quejas. La mayoría de la gente coincide en que, si el servicio es “más rápido y más cómodo y tiene mejores frecuencias”, habrá que pagar la diferencia. Lo que está por ver es si seguirán pensando igual en caso de que la brecha aumente. En el último consejo de Tuvisa, se comentó que Euskotren se está planteando aplicar una subida de cinco céntimos. Incremento que en parte podría venir motivado por la millonaria inversión que conllevarán a corto plazo las obras de ampliación del metro ligero hacia el este y el sur de Vitoria.

Al menos ese argumento, el de la necesidad impepinable de que la ciudadanía haga un pequeño esfuerzo para que se pueda mejorar un servicio deficitario per se, el que llevó al gabinete de Gorka Urtaran a plantear una subida de tarifas en los autobuses urbanos hasta equipararlas con las del tranvía. Su plan pasaba por incrementar el billete ordinario de 1,15 euros a los 1,35 euros que supone montarse en el metro ligero. En el caso de la tarjeta BAT, la forma de pago más común, la idea era que el viaje pasara de 0,56 euros a 0,73, pero en lugar de en un año, en dos.

Pero nada de eso sucederá. Todos los partidos representados en el consejo de Tuvisa, salvo el PNV y Hemen Gaude, votaron en contra y la convergencia de precios ha quedado definitivamente descartada. Fue una buena noticia para mucha gente, que había puesto el grito en el cielo al saber de los planes del gobierno municipal, pero en realidad podría no serlo tanto. Sin el incremento previsto, la empresa contará con un millón de euros menos para acometer sus inversiones, entre ellas la urgente renovación de la flota.

Con la mitad de esa cuantía de la que ya no se va disponer se iban a adquirir mediante renting siete nuevos autobuses y cuatro grúas. En 2017 se pensaba sumar otros tres nuevos autobuses a la flota y en 2018 y 2019 otros diez, cinco cada año. Además, hay líneas que a ciertas horas todavía se saturan y necesitan refuerzos que a veces, por culpa de medios, no terminan de llegar. Ya no ocurre tanto en Zabalgana, pero sí en Salburua y en determinadas zonas de paso de la línea 2 durante las primeras horas de la mañana. - J.S./T.D.