- Alquiler de bicicletas eléctricas, más tranvía, bidegorris, aparcabicis, motos, nuevas zonas 30, vehículos de reparto no contaminantes, modernización de los desocupados parkings subterráneos, mejor conexión entre el tren, el metro ligero y la estación de buses, etcétera. Arranca el curso político en el Ayuntamiento y algo empieza a moverse. El recién estrenado gobierno de Gorka Urtaran presentó ayer sus planes y retos para los próximos cuatro años haciendo especial hincapié en los asuntos relacionados con la movilidad y el transporte en la ciudad, siguiendo así la política emprendida por Gasteiz hace décadas. Bajo la premisa de ir construyendo una ciudad “inteligente y verde”, el concejal de Medio Ambiente, Borja Belandia, desgranó los principales proyectos que pretende acometer, cuya ejecución dependerá de la capacidad económica de la institución, para “mejorar la vida de los ciudadanos, incrementar las oportunidades de creación de empleo e implicar a los gasteiztarras en un mayor respeto al medio ambiente”. Un camino iniciado hace décadas -recordó- que ya ha dado sus primeros frutos como el nombramiento de Vitoria en 2012 capital verde europea, pero en el que “hay que seguir avanzando”. Planes los del PNV que, en líneas generales, respaldan todos los grupos de la oposición, salvo el PP. Y planes, de los que por el momento sólo se avanza una línea maestra, ya que Belandia no habló en su comparecencia ni de fechas de ejecución ni de dinero disponible.

Algunos de ellos, no obstante, están más avanzados que otros, caso de la ampliación del tranvía puesto que económicamente correría a cargo del Gobierno Vasco, donde también manda el PNV. Belandia confirmó ayer que esta legislatura el tranvía se extenderá desde Angulema por el sur hasta Adurza y las universidades, y por el este hacia Salburua. Además, se intentará avanzar en la conexión con Zabalgana. No está tan clara, sin embargo, la fórmula que finalmente se utilizará para la entrada de la alta velocidad en la ciudad, si será en las Trianas o en otro emplazamiento.

Otro de los proyectos que impulsarán los jeltzales es la modernización de la flota de Tuvisa, compuesta ahora por autobuses demasiado viejos y escasos en número, ya que la compañía apenas dispone de buses de reserva para atender emergencias. Además de la compra de vehículos eléctricos menos contaminantes, se habilitará un carril exclusivo para urbanos a lo largo de la línea periférica para poder aumentar la velocidad y reducir el tiempo de cada viaje. Son los denominados autobuses exprés (BRT) de los que ya habla el Plan de Movilidad Sostenible diseñado hace años para la ciudad.

Clara está también la intención de los jeltzales de seguir potenciando el uso de la bicicleta, con la construcción de más kilómetros de bidegorris, la transformación de nuevas calles en zonas 30 para reducir la velocidad de los coches y la instalación de más aparcabicis. Ya avanzó el alcalde también su idea de dar una vuelta a la actual ordenanza de la bici para reducir las restricciones que se puso a los ciclistas en las calles peatonales del centro ampliando el horario de paso. Para completar esta apuesta por las dos ruedas, Belandia adelantó que el Ayuntamiento pondrá en marcha un sistema de alquiler de bicicletas eléctricas. No se trata del modelo de préstamo que existió hace años, porque a día de hoy casi todos los ciudadanos que lo desean disponen de una bici, sino de poner a disposición de los gasteiztarras bicicletas eléctricas en aquellos puntos de la ciudad a los que no llega el transporte público; por ejemplo, en polígonos industriales como Jundiz. En este caso, la iniciativa serviría para acercar a los trabajadores a su empresa una vez que el autobús les deja a la entrada de la zona industrial, explica el ejecutivo nacionalista.

El fracaso de los parkings El Ayuntamiento ha eliminado en los últimos años miles de plazas de aparcamiento gratis en superficie que ha sustituido por otras de pago bajo tierra o en zona OTA. Un paulatino cambio que no ha tenido buena respuesta por parte de los ciudadanos, poco dispuestos a dejarse cada día un dineral en el estacionamiento de su coche. La idea inicial de los políticos de encarecer el aparcamiento para que los vitorianos dejaran el coche en casa y mejorar el tráfico de la ciudad dio sus frutos, pero ahora también se les vuelve en contra, ya que el Ayuntamiento se encuentra con numerosos parkings subterráneos de gestión pública vacíos que, sin embargo, hay que mantener. Un problema al que el gabinete de Urtaran quiere encontrar una solución.

De momento, no baraja la idea de que sean gratuitos o con tasas mucho más baratas, sí en cambio aboga por modernizar las instalaciones con aplicaciones tecnológicas que permitan un mayor control y seguridad de las plazas ocupadas y vacías; de los vehículos que entran y salen, etc. Mejoras a las que denomina “aparcamientos inteligentes” para hacer más atractivos los estacionamientos a los que ahora se resisten a entrar los conductores, como el Iradier Arena, el de la nueva estación de autobuses de Lakua, Artium o San Martín.

PP. La concejala Leticia Comerón duda de la capacidad del edil Borja Belandia y del gobierno en minoría del PNV para llevar a cabo los planes anunciados ayer en materia de Medio Ambiente. Critica el hecho de que los proyectos presentados no vayan acompañados de partida económica ni de fecha de puesta en marcha y pide a los jeltzales que no paren el ritmo de gestión de los últimos cuatro años.

EH Bildu. La portavoz soberanista, Miren Larrion, comparte en líneas generales la política medioambiental del PNV, pero propone poner en marcha un ambicioso plan agroalimentario con suelo público y sello de calidad para producir y vender alimentos sostenibles del campo a casa directamente, exige un control más férreo sobre la empresa FCC, un giro total a la “fracasada” política de recogida de basura doméstica, limitar las radiaciones electromagnéticas, convertir los Montes de Vitoria en Parque Natural y vetar el ‘fracking’.

PSE. El portavoz socialista, Peio López de Munain, comparte en líneas generales la política medioambiental del PNV, pero exige mayor rigor en el control de la empresa FCC, que se encarga de la limpieza y recogida de basuras; pide que se limpien las alcantarillas, arquetas y desagües para evitar inundaciones cada vez que llueve, que se protejan los Montes de Vitoria, se vete el ‘fracking’ en el municipio, se limpien los humedales y acuíferos contaminados y se retiren los cables eléctricos y transformadores que aún se ven en barrios como Arana.

Sumando-Hemen Gaude. Jorge Hinojal propone que el Ayuntamiento rompa con las empresas ligadas a Garoña, que se potencia el CEA y se dé un uso a la Casa de la Dehesa, actualizar la ordenanza de perros, solucionar el “fracaso” del quinto contenedor, y pide al PNV que cumpla su programa.

Irabazi. El edil Óscar Fernández está preocupado por la mala calidad del agua de los humedales de Salburua y reclama medidas urgentes de lucha contra el cambio climático.