agurain - La undécima edición del Festival Intercultural de Agurain organizada por la Asociación Lazos de Amistad con el inmigrante (ALAI) se celebrará hoy y el sábado con un programa repleto de actos entre los que destacan las danzas, los juegos infantiles, un concurso de arroces y una comida popular.

ALAI ha programado para hoy en la sala Harresi una muestra de arte internacional que aunará danzas, bertsos, cuentacuentos y música. No obstante, el acto principal del programa de ese año será el Festival Intercultural que tendrá lugar el sábado en la plaza de Santa María. Se iniciará a las 13.00 horas con una recepción con txalaparta y animación musical con ritmos del mundo. Media hora más tarde dará comienzo el concurso de arroces, donde los participantes demostrarán las diferentes maneras en las que se cocina el arroz en los distintos países del mundo. A las 14.30 horas dará comienzo una comida popular con la degustación de platos típicos elaborados por los propios inmigrantes de la localidad. “Invitamos a las familias participantes a traer un plato para compartir en la comida popular porque es una forma de saborear recetas de otras culturas”, apuntan desde la asociación. Seguidamente comenzarán los juegos infantiles, habrá piñata para los pequeños y distintos concursos. Durante todo el día, además, puestos de comercio justo en la plaza. Personas llegadas desde diversos países y vascos se han unido a la agrupación con el fin de cubrir las necesidades y carencias de los primeros para hacer más acogedora la llegada de extranjeros a la localidad. La asociación se reúne semanalmente.

El objetivo inicial de ALAI es la acogida, salir al encuentro del inmigrante que llega a Agurain. Entre los principales escollos a los que un extranjero tiene que hacer frente cuando llega a la villa se encuentran el trabajo y la vivienda. Fundada en 2005 y con medio centenar de miembros, tiene como objetivo ofrecer apoyo y amistad al inmigrante, así como dar a conocer las realidades de estas personas a la sociedad. La idea de crear esta asociación surgió de un grupo de amigos inmigrantes y vascos residentes en Agurain, que viendo cómo cada día se iba incrementando la llegada de inmigrantes creyó que podían hacer más fácil la acogida acercándose a ellos e interesándose por su situación. “Cuando decides dejar tu tierra para ir a otro lugar desconocido, lo que más deseas es encontrar algo similar al calor familiar que dejaste atrás, gente que te acoja y te facilite un lugar donde iniciar, o por lo menos una sonrisa, alguien que te diga ¡venga, ánimo! Sin cuestionar quién eres, qué haces aquí, de dónde vienes”, apuntan. Por supuesto, al comienzo no tenían ni siquiera la idea de crear una asociación. Iniciaron su proyecto visitando de casa en casa a los inmigrantes. “Queríamos formar un grupo sin connotaciones políticas ni religiosas, además de que fuera abierto a todas las culturas, donde también participaran los vascos, porque nos parecía la forma más coherente de fomentar la integración en una cultura.

Así, poco a poco, se fue extendiendo la idea, hasta que logramos formar un grupo más numeroso, nuestro punto de encuentro era la Casa Cural”, explican en su carta de presentación. Y de ahí fueron surgiendo ideas, sugerencias y mucha creatividad porque “vimos que podíamos hacer mucho más que fomentar el intercambio cultural”.