BIBLAO. Según ha informado hoy el departamento vasco de Seguridad, entre los detenidos, de edades comprendidas entre los 40 y 65 años, dos hombres y una mujer fueron arrestados en Araba y otro varón lo fue en Málaga.
La investigación fue iniciada por la Policía vasca a finales de 2014 al tener constancia de la existencia de una banda que recibía estupefacientes que procedían de Málaga, Sevilla y Cádiz, y que eran transportados al norte de Europa por un individuo que residía en Vitoria, sobre el que se centraron las primeras indagaciones.
Los agentes trasladaron sus pesquisas hasta Málaga, donde comprobaron que el varón investigado junto con otro, también con antecedentes por tráfico de drogas, contactaba con un tercer individuo que les entregaba las sustancias estupefacientes, que escondían en un remolque con doble fondo.
Los ertzainas trabajaron en Andalucía en colaboración con el grupo EDOA número 3 de Málaga de la Guardia Civil.
Finalmente, el jueves de la semana pasada, la operación culminó con la detención de dos varones en Armiñón cuando llegaban a esta localidad alavesa procedentes de Andalucía en un vehículo con un remolque en cuyo interior fueron encontrados escondidos 25 kilos de cogollos de marihuana de gran pureza.
Una mujer integrante de la banda era arrestada posteriormente en Vitoria, mientras que un tercer varón de nacionalidad extranjera lo era en Málaga.
Además de la droga incautada, que alcanzaría un valor de 100.000 euros (que incluso podría quintuplicarse en el destino final), se decomisaron otros 10.000 euros en metálico, tres vehículos, dos remolques con sistemas de ocultación preparados en sus carrocerías y en las plataformas para el transporte de sustancias, básculas de precisión, envasadoras y termoselladoras.
Asimismo se encontraron teléfonos móviles, útiles para la manipulación y envasado de las sustancias, herramientas para realizar zulos en vehículos y abundante documentación relacionada con el delito investigado.
Tras las detenciones, se realizó un registro en una granja de Arangiz (Álava), que servía como depósito para los vehículos y los remolques donde también se guardaba provisionalmente la droga, en un piso de Vitoria y en dos viviendas unifamiliares de Málaga.
El grupo de delincuentes llevaba dos años en funcionamiento y realizaba traslados de droga dos veces al mes, con un total anual cercano a la media tonelada, por un valor superior a los dos millones de euros.
Según explican las fuentes, el nuevo objetivo de la banda era activar otra vía de transporte y almacenamiento en Barcelona con destino a Europa.
En la Ciudad Condal incluso habían alquilado un garaje para utilizarlo como punto de paso para la droga y habían mantenido encuentros con traficantes extranjeros.
En este sentido y a través de Europol las investigaciones de la Ertzaintza pueden tener su continuación en otros países europeos, para identificar y llevar ante la justicia a más implicados en la organización.