Vitoria - La Fiscalía alavesa ha pedido 12 años de cárcel para un hombre acusado de asestar varias cuchilladas que hirieron de gravedad a un trabajador de un centro de asistencia y rehabilitación para toxicómanos en Vitoria donde había sido tratado.

El escrito del Ministerio Público explica que el suceso tuvo lugar el 10 de abril de 2013, cuando el procesado se presentó sobre las 9.15 horas en el citado centro y le pidió un cuchillo a uno de sus trabajadores, a lo que éste se negó. El acusado abandonó el lugar, pero volvió casi cuatro horas después y, sin mediar palabra, le clavó en el pecho al mismo trabajador un “cuchillo jamonero de 25 centímetros de hoja”. El agresor, según la Fiscalía, intentó asestarle una nueva puñalada, pero la víctima se defendió sujetándole la mano. Sin embargo, no pudo impedir que el acusado le clavara el cuchillo en la pierna derecha y le propinara varios puñetazos en la cara. Finalmente, el trabajador logró arrebatarle el cuchillo y el agresor huyó del lugar.

La Ertzaintza le detuvo sobre las 15.30 horas en la estación de autobuses. Como consecuencia del ataque, el empleado, de 40 años, sufrió una herida en la zona pectoral izquierda de 1,5 centímetros de longitud con contusión pulmonar, así como un neumotórax y un enfisema. La cuchillada en la pierna le provocó una erosión “muy superficial” en la cara interna del muslo derecho. El hombre estuvo ingresado seis días en un centro hospitalario y permaneció un tiempo en la UCI. La Fiscalía destaca que la trayectoria del cuchillo en el pecho estuvo cerca de la aorta, “cuya lesión puede ocasionar la muerte”, y que las heridas pulmonares también pueden tener complicaciones mortales.

El acusado sufre un trastorno por dependencia al cannabis, a la cocaína y al alcohol, pero el Ministerio Público estima que cuando cometió los hechos no tenía las facultades mermadas como para no “conocer sus actos”. El procesado estuvo en prisión provisional hasta el 30 de septiembre de 2013, cuando se decretó su libertad provisional con la medida cautelar de no acercarse ni comunicarse con su víctima a una distancia inferior a 200 metros. La Fiscalía considera que estos hechos constituyen un delito de asesinato en grado de tentativa y, además de la pena de cárcel, pide que se le imponga una medida de alejamiento igual que la cautelar durante 13 años. El juicio por estos hechos tendrá lugar esta próxima semana en la Audiencia Provincial de Álava. - Efe