gasteiz - El diputado foral de Administración Local, Javier Ruiz de Arbulo, "no sólo ha contestado tarde a las peticiones de información, sino que además ha creado una alarma social que después se ha visto que no se corresponde con la realidad". Así valoraba el portavoz del grupo juntero del PSE-EE, Josu López Ubierna, las aclaraciones hechas ayer por el gestor popular en la comisión correspondiente de Juntas Generales de Álava. Se da la circunstancia de que el procurador socialista había solicitado en varias ocasiones la comparecencia del diputado para que aclarase lo ocurrido con las promociones de unas viviendas a precio tasado en Lapuebla de Labarca y de Samaniego y que continúan sin ser vendidas.
El juntero socialista recordó que el primer compromiso (de informar sobre las viviendas) se asumió en el Pleno del 1 de octubre de 2012. "Este grupo tiene registrada la solicitud de comparecencia para explicar el informe desde el pasado 24 de octubre de 2012". "El retraso en la remisión del informe y la no comparecencia del hasta ahora diputado foral de Administración Local en Juntas Generales -añadía el juntero-, advierten de que existen dificultades y razones que imposibilitan la elaboración y evacuación del informe foral". Precisamente, aquel informe debía dar razones al discurso foral de Ruiz de Arbulo que previamente había descalificado el asunto de las viviendas. "Es preocupante la realidad en que se encuentra este expediente, la información incompleta que contiene, y las múltiples irregularidades que se detectan desde su simple lectura (...) Es un expediente que espero que no haya más en toda la casa, porque apesta profundamente".
Pese a aquellas palabras, el informe ha permanecido congelado hasta el día 5 de junio de 2014, "dejando una gran cantidad de dudas a los junteros". Primero por el enorme retraso y después porque el informe no aclara correctamente lo que sucedió, especialmente con las viviendas de Lapuebla de Labarca y después porque es la propia empresa, antes Arabarri y ahora Arabako Lanak, quien ha realizado el texto y lo ha firmado, "cuando hubiera sido más imparcial y clarificador que lo hubiera hecho la propia Diputación Foral u otra empresa pública, como Vías de Álava".
Para López Ubierna "el diputado hizo acusaciones muy graves e incluso habló de responsabilidades administrativas y penales. Y sin embargo ahora no pasa nada de eso". Por ello "el acusador ha quedado ahora en evidencia porque lo que dijo el diputado ayer en la Comisión no concuerda con lo que dijo anteriormente". Y es que la conclusión por parte de Ruiz de Arbulo es que las viviendas se paralizaron por la crisis económica y sin otra connotación que la pérdida económica, especialmente llamativa en el caso de Lapuebla, donde las viviendas están sin hacer y se tuvo que pagar a la empresa que se le adjudicó la obra cerca de 300.000 euros. En Samaniego las viviendas sí están terminadas.
Para López Ubierna, esta historia "ha creado una alarma social innecesaria por parte de la Diputación, que pone en duda las aptitudes y las actitudes de Ruiz de Arbulo y le invalidan para ejercer ese cargo". Por ello, desde el PSE se va a estudiar a fondo los informes que por fin han llegado para valorar otras acciones en el futuro sobre esta cuestión.
Las obras de las viviendas de precio tasado en Lapuebla de Labarca, que construía Construcciones Hierro por encargo de Arabarri, se paralizaron antes del verano de 2011. La promoción consistía en la construcción de ocho viviendas a precio tasado (alrededor de 72.000 euros) en el edificio denominado La Casona, un gran inmueble sobre el que se barajó anteriormente como centro polivalente social y cultural donde las asociaciones locales pudieran desarrollar sus actividades, ya que no existe un lugar en la localidad que pueda acoger a todos los colectivos.
El proyecto tuvo diversas discrepancias. A pesar de ello, se comenzó el proyecto de obra en base a ese edificio y, desde el Ayuntamiento, se abrió un plazo de inscripción, ya que esas viviendas tenían que estar destinadas a vecinos de la localidad y con determinados condicionantes de renta. La obra se inició, con un presupuesto de 660.000 euros, pero coincidiendo con el cambio de Ejecutivo en la Diputación los trabajos se paralizaron, aunque el contratista cobró lo que se le adeudaba hasta ese momento. A eso se añadió que la crisis económica también influyó. Finalmente, de los 19 peticionarios de vivienda sólo quedó uno, con lo que en la institución foral se descartó el seguir con la construcción.
El otro conflicto que se trato en la Comisión era sobre las viviendas que se construyeron en Samaniego. Se trataba de seis, dos en planta baja y cuatro dúplex, que realizó la Unión Temporal de Empresas (UTE) Limpre Restauraciones y Bidailan Construcciones con una inversión de 800.000 euros y un plazo de 52 semanas. Las viviendas tienen entre 70 y 90 metros cuadrados y el precio rondaba los 130.000 euros sin IVA. En este caso concreto, el problema de que permanezcan vacías es que los peticionarios, todos de la comunidad rumana, se trasladaron a vivir fuera.
En otro orden de cosas, Ruiz de Arbulo justificó una obra adjudicada por el alcalde de Labastida, Ignacio Gil (PP), en circunstancias por aclarar. Se trata de unos trabajos que se incluyeron en el Plan Foral de Obras y Servicios del pasado año para la urbanización del barrio Otero del citado municipio. Según la información recaba por EH Bildu, nunca se formalizó la gestión de esta obra y se llevó a cabo mediante un encargo verbal del primer edil. Posteriormente, en abril, se encargó la asistencia técnica a Eraizer, una empresa que todavía no se había constituido. El proyecto no se aprobó hasta junio en Pleno pero su visado se produciría en diciembre, seis meses después.
Para la coalición es una irregularidad de la sociedad pública Arabako Lanak, ya que es una obra que nunca fue encargada oficialmente por el Ayuntamiento de Labastida y cuya factura, que ronda los 18.000 euros no fue girada hasta que la coalición preguntó por ella. A petición de EH Bildu, Ruiz de Arbulo compareció ayer en las Juntas Generales. Pero se limitó a asegurar que "apalabrar" encomiendas de esas características es una práctica habitual.
Octubre de 2012. El PP se compromete a comparecer en las Juntas Generales de Álava para explicar el informe foral que debía dar razones al discurso foral de Ruiz de Arbulo, quien previamente había descalificado el asunto de las viviendas.
Junio de 2014. El informe ha estado congelado hasta ahora, dejando gran cantidad de dudas a los junteros, tanto por el enorme retraso como porque el informe no aclara correctamente lo que sucedió, especialmente con las viviendas de Lapuebla de Labarca.
2