gasteiz - Para las salas de cine de Álava cualquier tiempo pasado fue mejor. El cierre de las nueve pantallas de los Yelmo Gorbeia deja a Gasteiz con 17 salas, más el Amurrio Antzokia, la sala Harresi de Agurain y las proyecciones esporádicas que se realizan en localidades como Laudio. Los cines Florida y El Boulevard son ahora el único resquicio que les queda a los valientes cinéfilos gasteiztarras dispuestos a rascarse el bolsillo pese a la subida del IVA. Y todo para que luego toque al lado un vecino de asiento que se atiborra a comida, habla a grito pelado y consulta su smartphone una, y otra, y otra vez. Ir al cine se ha convertido en un ejercicio de paciencia digna del santo Job, aunque a este ritmo de cierre de salas en Vitoria el séptimo arte empieza a ser un modelo de ocio en peligro de extinción.
Huérfana de empresas dispuestas a instalar más opciones entre las que elegir, la desaparición de Yelmo Gorbeia coloca a la provincia a la cola del Estado en número de pantallas. Concretamente, según el censo de salas de cine elaborado por la Asociación para la Investigación de Medios de Comunicación (AIMC), entre las cincuenta provincias del Estado, Álava ocupa la posición 39 en lo que a número de pantallas se refiere. Unas cifras muy similares a las de provincias como Huesca, Palencia, Segovia, Zamora o Guadalajara. De hecho, además de las seis citadas, sólo Ceuta, Melilla, Ourense, Cuenca, Soria y Teruel tienen actualmente menos pantallas de cine que Álava. Lejos quedan ya los viejos tiempos de gloria para el sector, cuando los proyectores iluminaban hasta 61 salas a lo largo y ancho del territorio histórico. Corría el año 2003 y los espectadores poblaban los patios de butaca para asombrarse con la batalla de Minas Tirith en El retorno del rey, la odisea de Marlin y Dory en Buscando a Nemo, la katana de Uma Thurman en Kill Bill o la melancolía de Scarlett Johansson en una cinta como Lost in Translation.
A partir de esta semana, la oferta cinematográfica gasteiztarra se concentra en dos cines -Florida y El Boulevard- que esta semana sin ir más lejos proyectan entre ambos quince películas en total. Alejado de la capital en el centro comercial de Etxabarri Ibiña, los Yelmo Gorbeia se habían convertido desde hacía mucho tiempo en el oasis de aquéllos que querían disfrutar de una película sin los inconvenientes de la masificación, especialmente para los que acudían entre semana. Una tranquilidad con la que, evidentemente, la cadena de cines no estaba precisamente satisfecha.
Yelmo Cines, uno de los cuatro referentes a nivel estatal con un volumen de negocio que aglutina el 14% del sector, decidió cortar por lo sano hace un mes y dejar en la calle a la mayor parte de los 16 trabajadores que mantenían a punto las instalaciones situadas en este complejo de ocio y compras que, tras la marcha de Inditex y otras tiendas del sector textil, sobrevive a marchas forzadas gracias al tirón de Decathlon, el hipermercado Carrefour y los muñequitos del Happy Meal de McDonald's como grandes reclamos.
la dolce vita Así las cosas, teniendo en cuenta que una de las nueve salas cerradas en Gorbeia, la número 3, era la de mayor capacidad de toda la provincia con 444 espectadores, desde el pasado lunes son las pantallas número 7 y 8 de El Boulevard las que más personas pueden albergar en su interior, con 369 y 368 respectivamente. En el otro lado de la balanza queda la sala número 3 de los Florida, la más pequeña de la provincia con 88 butacas en su interior. Únicos supervivientes fuera del cobijo de un centro comercial, los Florida mantienen la llama de antiguos compañeros de viaje como los cines Guridi (clausurados en 2008), los Mikeldi (en 2005), los Samaniego (en 2001) o los Azul (en 2004).
Por su parte, El Boulevard hace lo propio con una propuesta en la que ha perdido rivales como los cines del complejo comercial de Lakua, que cerraron en 2007, o los ya extintos Gorbeia. Mientras tanto, los vecinos de localidades como Amurrio cuentan al menos con la oferta cinematográfica que, principalmente durante los fines de semana, ofrece el Amurrio Antzokia, con capacidad para 336 espectadores. También Agurain, con la sala Harresi, oferta sesiones para sus vecinos. Además, en diversos pueblos del territorio histórico se llevan a cabo proyecciones esporádicas, como Laudio y el Centro Municipal de Formación Profesional. Eso sin contar a los se instalan pantallas de 50 pulgadas y equipos Dolby Surround 5.1 en el salón de su propia casa.
Entre Zamora y Huesca. Álava tiene ahora mismo un número de salas de cine similar al de provincias como Huesca, Palencia, Segovia, Zamora o Guadalajara.
Sin la sala más grande. Yelmo Gorbeia, que bajó la persiana el pasado domingo, contaba con la sala de mayor capacidad de la provincia, con un total de 444 espectadores.
39
Las 17 pantallas de Vitoria más el Amurrio Antzokia y la sala Harresi colocan a Álava a la cola del Estado en número de salas de cine. Entre las cincuenta provincias estatales, la alavesa ocupa la posición 39.