Vitoria. Apenas una hora de Pleno bastó ayer para suprimir los 260 euros de tasa de basuras por vivienda vacía que el Ayuntamiento ha girado este año a los vitorianos. Un cobro "injusto" para todos, que ha hecho llegar más de 1.500 reclamaciones a las oficinas municipales. En 2013 ya no llegará a los hogares este recibo especial, anunció Javier Maroto. El coste de la recogida de residuos volverá a ser de algo más de cuarenta euros a partir del 1 de enero.
Bastaron sesenta minutos largos de Pleno para eliminar el pago que grava las viviendas vacías porque el acuerdo entre PP y PNV ya se había cocinado la tarde del lunes, invalidando así el alcanzado el viernes pasado entre populares y Bildu. Pero, ¿por qué esta vuelta de 180 grados? El alcalde dice que prefería suprimir esta tasa, por injusta, desde el principio, pero como el PNV no retiró el viernes su enmienda a la totalidad de las ordenanzas fiscales, no pudo. Y pactó con la coalición abertzale. El PNV mantiene que desde el principio pidió la supresión de la tasa de basuras para las viviendas vacías, pero no retiró su enmienda a la totalidad porque Maroto no le garantizó el viernes que suprimiría la polémica tasa. En cambio, sí lo hizo el lunes. Los nacionalistas facilitaron el camino y el PP se decantó por los jeltzales. Vaivenes de la política.
En el trasfondo, a nadie se le escapa el interés de PP y PNV por que Vitoria tenga presupuestos en 2013. Y así lo reconocieron ayer ambos grupos: "No tenemos ningún inconveniente en reconocer que queremos que Vitoria tenga presupuestos", manifestó el edil jeltzale Borja Belandia. "En este momento es importante llegar a acuerdos", añadió el popular Manu Uriarte.
indignación de bildu y pse La decisión de suprimir la tasa de basuras para las viviendas vacías desató la indignación en las filas de Bildu y PSE por el cambio de rumbo de los acontecimientos. Para la coalición abertzale, este acuerdo de "la derecha", tiene por objeto salvar a la Banca y a los promotores de pagar los 260 euros. Es la lectura del concejal Antxon Belakortu: "Hoy el champán se va a abrir donde los poderosos", dijo.
El edil explicó que, con esta medida, el Ayuntamiento va a dejar de ingresar tres mil euros procedentes de personas jurídicas que figuran como dueños de inmuebles deshabitados. "Han salvado a los bancos, a los que desahucian", lamenta Belakortu. De "vaivén", "baile de la yenca", "circo" y "engaño" tachó la edil socialista Marian Gutiérrez lo ocurrido en dos días en el Ayuntamiento. Criticó los cambios de opinión del equipo de gobierno, fruto de la "improvisación" y de la minoría de concejales con la que gobierna Maroto (9 de 27). Recordó que algo similar ya ocurrió el pasado año con la retirada de los presupuestos y se ha vuelto a repetir ahora con las ordenanzas fiscales, las cuentas de 2013 y la tasa de basuras para viviendas vacías. "Su palabra tiene fecha de caducidad" -dijo a Maroto- "¿Qué garantías tenemos con ustedes? Ninguna". Aun así, para el PSE, lo peor de todo es la nula progresividad fiscal de los impuestos en Vitoria: "Optan por la congelación, o sea, que todos paguen lo mismo, y luego cargan la presión fiscal en las tasas y precios públicos". La supresión definitiva de la polémica tasa se hará el 28 de diciembre.