Labastida. Si el sábado Labastida se colapsó por la gran cantidad de personas que acudieron a la bajada del Pellejo, ayer domingo, día grande de las fiestas de Las Reliquias, a cuya advocación se celebran estos festejos, la villa riojanoalavesa volvió a demostrar el creciente protagonismo que está teniendo en el plano turístico.

La animación comenzó a temprana hora de la mañana, ya que tras un reparto de chocolatada a los trasnochadores y madrugadores, se celebró el primero de los encierros de vaquillas, a los que tan aficionados son en estas latitudes. Tras ellas se llevó a cabo con normalidad el programa previsto. Así, hubo pasacalles mientras en los bares se ponían al alcance de la vista sabrosas ofertas a base de pintxos variados y vino de Rioja. Para los más pequeños se habilitaron varios espacios. Por un lado, cerca de las piscinas hubo juegos con hinchables, mientras que en la explanada de la ikastola se situaron las barracas y los consabidos puestos con ropas, colgantes y juguetes.

Como es tradicional, tras la procesión y misa de Las Reliquias, en la propia iglesia parroquial se celebró un concierto a cargo de la banda Marrate, de Labastida y la tarde se dedicó a temas más relajados, como los partidos de pelota que enfrentaron a Rico IV y Untoria contra Tainta y Mendizabal II y el de Olaizola I e Iza contra Urrutikoetxea y Beginoi. La orquesta Séptima Avenida puso el broche bailable hasta la madrugada.

Para hoy lunes, la fiesta se reconvierte en el Día del Niño, aunque la primera de las actividades no es para ellos. Se trata de un recorrido de caza en la zona de San Ginés. Pero a las diez y media de la mañana comenzarán las actividades más infantiles, como Faunalandia, en la plaza de D. Alejandro, y para que a los padres o abuelos se les haga más llevadera la espera de sus retoños a la una habrá una chistorrada en la plaza organizada por la asociación de jubilados y pensionistas San Ginés.

encierro infantil Por la tarde habrá un encierro infantil y un poco más tarde, a las seis, teatro de humor en la plaza con la Compañía Paki Paya, con el espectáculo Shake! Sake! Sake! y posteriormente una verbena infantil con la orquesta Lisker, que también amenizará la noche. Por cierto, que uno de los espectáculos más esperados será a la una y media de la madrugada en la plaza de la Paz. Se trata del concurso de tragones, que ha organizado la sociedad gastronómica Mahatsadar.