Vitoria. ¿Qué será de los Montes de Vitoria como parque natural? No es fácil responder a esta pregunta, aunque ya haya sido presentado el borrador del Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN), documento que planifica cómo debe preservarse este espacio. Las presiones se mantienen, porque el proyecto de los pozos de gas se enclava dentro de lo que el Gobierno Vasco ha denominado zona periférica de protección, y el desarrollo de la actividad agrícola y ganadera queda en el aire, porque no dice qué condiciones o restricciones podría conllevar la nueva figura. Por eso, los 33 pueblos y siete municipios afectados han reaccionado negativamente. Okina e Izartza han rechazado ya formar parte del parque natural, el Ayuntamiento de Bernedo -municipio que los lidera- respalda su postura y la asociación de concejos de Vitoria (Acovi) ha advertido de que no va a aceptar "algo que se está haciendo muy mal".
Las personas que trabajan en los Montes de Vitoria se quejan de la "preocupante falta de información" del borrador y, además, no entienden por qué ahora el Gobierno Vasco tiene "tanta prisa" en el proceso tras años de paralización. Les ha dado tan sólo una semana de tiempo para presentar alegaciones. "Esa premura no cuadra e invita a pensar quién sabe qué... Cada uno tiene sus ideas", señala la presidenta de Acovi, Miren Fernández de Landa. Lo que ella tiene claro es que "este tema no se puede tratar a la ligera en siete días, porque de ello depende el futuro de los pueblos, y si el Gobierno Vasco no ve lo serio que es el asunto, entonces tendrá que empezar de cero y hacer las cosas bien".
También la alcaldesa de Bernedo, Juana Velasco, advierte de la importancia trascendental de este documento y de la preocupación que ha suscitado tanta indefinición. "Para algunos declarar parque natural los Montes de Vitoria es proteger una zona. Para otros, se está hablando de su sustento. Y, sin embargo, no sabemos cómo se van a ver afectadas las personas que tienen tierras o ganado porque falta información y la que hay sólo habla de límites", critica la primer edil de este municipio. En su caso, los pueblos afectados son Okina e Izartza, que ya han enviado una carta a la Diputación alavesa mostrando su rechazo a formar parte del futuro parque natural. Son los primeros tránsfugas, aunque quién sabe si no surgirán otros en breve.
Acovi va a celebrar una junta directiva con carácter urgente este mismo lunes "para decidir qué acciones tomar". Fernández de Landa se lamenta de que "los pueblos han protegido los Montes de Vitoria como su joya y ahora se habla de proteger cuando no se dice de qué ni qué usos, y parece que el fracking sería posible mientras se deja fuera el centro penitenciario". "Esta situación es muy kafkiana", apuntilla la representante de la zona rural de Vitoria.
Según el borrador del plan, la zona de estudio se compone de 13.631 hectáreas, de las que 12.276 forman el núcleo del futuro parque natural y 1.355 la denominada zona periférica de protección, un área de menor valor ecológico donde el EVE quiere abrir los dos primeros pozos de extracción de gas. Eso sí, como ya adelantó este periódico , quedan fuera del enclave zonas conflictivas como el vertedero de Gardelegi, Berrozi y la cárcel de Zaballa. "No tiene mucho sentido que se permita el fracking y moleste la cárcel, ¿no?", insiste la presidenta de Acovi.
Desde Vitoria, el gabinete Maroto se limitó a señalar que "hay buena sintonía" entre ambas administraciones y que técnicos de uno y otro lado están trabajando "para llegar a un documento definitivo".