Vitoria. Llegar a más pueblos, por menos precio e incluir a los hospitales como parada en los trayectos entre la zona rural y la ciudad. Éstas son las tres grandes peticiones de mejora que, antes de la pasada Nochebuena, hizo llegar la Asociación de Concejos de Vitoria al Ayuntamiento. La entidad reconoce que había más posibles cambios en el proyecto de transporte a la demanda para los pueblos que se baraja en la capital alavesa, pero finalmente ha reducido esas propuestas a tres modificaciones vitales. Ahora esperará la respuesta del gabinete Maroto. Por el momento, ha solicitado una reunión con el alcalde para trasladarle éste y otros problemas.

Las dudas sobre el papel de la zona rural, su inclusión en los próximos Presupuestos municipales para 2012 y las partidas para eventos festivos o culturales son algunos de los puntos que la presidenta de Acovi, Miren Fernández de Landa, tiene en su agenda. El transporte a la demanda también está entre ellos. La portavoz de los concejos reconoce su preocupación por que, en el último consejo de la Zona Rural, se subrayara que la puesta en marcha de ese proyecto piloto de transporte a la demanda dependía de lograr una subvención clave, la del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (Idae), y de implicar a otras instituciones. Acovi, mientras, exige que por fin se aplique un proyecto que, durante la etapa Lazcoz, estuvo contemplado en varias de las Cuentas pero no llegó a ejecutarse. Al menos hasta ahora.

El sistema, ya estudiado por los grupos municipales, consiste en habilitar una flota de cinco a ocho taxis que acercaría a los vecinos de diversos pueblos hasta Vitoria. Y, en concreto, también hasta centros de salud y escolares o hasta las paradas de Tuvisa más próximas. El proyecto está vinculado a la implicación de una compañía, Skybus, que ya dispone de la herramienta tecnológica necesaria para coordinar el servicio, que admitiría reservas durante el último día laborable anterior al trayecto o bien con dos horas de antelación, pero en este caso en función de la disponibilidad del vehículo o de si el viaje coincide con otro ya concertado. En la documentación ya estudiada por el Consistorio también se plantea un precio: dos euros por viaje, 1,60 para familias numerosas y un euro para las familias numerosas especiales.

Los concejos valoraron de forma positiva este paso adelante para solventar una demanda histórica, la falta de conexiones entre la zona rural y la ciudad, pero desde el primer momento también mostraron sus dudas. Sobre el número de concejos a los que llegaría el servicio, las paradas y el precio.

Esas tres propuestas de mejora ya han llegado formalmente al Consistorio. La Asociación de Concejos reunió las opiniones de las juntas y de los vecinos y elaboró un documento que, antes de Nochebuena, envió al Ayuntamiento para pedirle que amplíe el número de concejos a los que llegaría la experiencia piloto y que, para ello, se guíen por aquellas zonas que carecen de transporte de Tuvisa y no se incluya a quienes tienen transporte de la Diputación, ya que éste no opera durante los fines de semana y sus horarios y frecuencias "no cubren las necesidades reales". Por ello, piden que incluya en el proyecto a Miñano Mayor, Gamarra Mayor, Elorriaga, Arcaute, Ilarraza, Matauco, Oreitia, Ascarza, Argandoña y Andollu.

otras mejoras Por otro lado, Acovi también espera que los servicios tengan paradas en los hospitales de Vitoria. La asociación, además, recuerda la necesidad de plantear el servicio en el sentido contrario, desde la ciudad hacia los pueblos; y, por último, está el tema mencionado del precio. Los concejos creen que, con dos euros, sólo se satisface un uso "puntual", pero no el regular. Por ello, piden descuentos para jubilados y para los viajeros más frecuentes.

Falta por conocer ahora la respuesta de los partidos. En cualquier caso, parece que hay escaso margen al menos en el apartado económico, ya que el estudio realizado advierte, de entrada, del elevado coste que conlleva este sistema de transporte para unos núcleos tan escasamente poblados y dispersos. Acovi ha solicitado una reunión en persona con el alcalde, y espera que levante la bandera y se muestre abierto al diálogo.