vitoria. "Debemos buscar complicidades, aunque se piense distinto". El alcalde de Vitoria, Javier Maroto, explicó ayer de esta forma que el Ayuntamiento finalmente saldará su deuda de 1,36 millones con el Gobierno Vasco por las obras para extender el tranvía hasta el centro del barrio. A pesar de que el PP en su día mostró dudas sobre este pago, porque no constaba en el presupuesto municipal y porque había dudas sobre las exigencias medioambientales del proyecto, los populares finalmente han sumado esta semana sus votos al PSE para abonar la partida. Maroto, eso sí, dio a entender ayer que esas diferencias de criterio se mantienen.

"Esa obra no se ha hecho como los vecinos querían. Se ha generado un conflicto. Y hay que tener en cuenta que, a pesar de que el tranvía lo quiere todo el mundo en la ciudad, este barrio ha sido el único donde ha habido polémica", apuntó el dirigente popular. En cualquier caso, Maroto insistió en que esta controversia ya "pertenece al pasado, y no quiero removerlo" y la actualidad venía marcada por el convenio sobre estas obras, firmado entre el Gobierno Vasco, la Diputación y el Ayuntamiento de Vitoria, y que todavía no se había saldado por parte del Consistorio. Así que el alcalde considera que la obligación era "pagar las facturas que se deben" por una cuestión de "lealtad institucional". De lo contrario, Maroto se preguntó cómo podría esperar la "complicidad" del Gobierno Vasco para, por ejemplo, seguir apostando por el tranvía. Por ello, insistió en que saldar esta deuda ha sido "un acto de responsabilidad", con independencia de que el proyecto aprobado "nos guste más o menos".

PNV y Bildu, sin embargo, votaron este jueves en contra de ese pago en una reunión del consejo de Ensanche 21: el grupo jeltzale, por las dudas sobre los trámites medioambientales que ha seguido la obra; la colación, por su posición en contra de un proyecto que no da servicio a todo el barrio y no cuenta con el apoyo de los vecinos. PSE y PP sí se posicionaron a favor del abono, una suma que garantizó su continuidad.

los fondos de ensanche 21 La medida ya está tomada, con cargo a los fondos de Ensanche 21. Maroto destacó precisamente la actitud "positiva" de los grupos municipales a la hora de plantear cómo se pueden utilizar los fondos de la sociedad urbanística municipal, después de que, con la paralización del BAI Center, los 50 millones en su día reservados para el auditorio se hayan quedado en la caja. Así que antes se dejaban los ahorros a cero y ahora se puede hablar de una "situación holgada"; para aprovecharla, el primer edil consideró que hay "buena sintonía" entre los partidos, que apostarían por utilizar esta financiación para los centros cívicos de los nuevos barrios y para otros equipamientos, por ejemplo de carácter educativo.