Bildu, que tanto defiende la participación ciudadana, se ha topado, sin embargo, con el boicot de los vecinos en el asunto de la estación.

Bueno, no estoy de acuerdo con esa formulación. Cuando llegamos al Ayuntamiento nos encontramos con un proyecto -el BAI Center-, sin consenso ni financiación, que costaba 180 millones y había creado un socavón tremendo en la plaza Euskaltzaindia con el que no se sabía qué hacer. Y un segundo proyecto de estación de autobuses, con un referéndum en contra. Eso significa que ya no estamos en el minuto cero sino en el 89 y las propuestas que hay sobre la mesa son dos: Arriaga o Euskaltzaindia, y de ellas, la menos mala es la segunda.

Una decisión condicionada.

Sin duda. Además, los ciudadanos ya están un poco hartos de proyectos que, al final, acaban en la basura, con los gastos que eso acarrea: dos auditorios, Plan Alhóndiga, Krea, estación de Arriaga, Kronos... Nos parece una irresponsabilidad empezar otra vez de cero, cuando la terminal de Los Herrán pide a gritos una solución urgente.

Ahora entenderá lo que siente un alcalde cuando los vecinos se le echan encima.

Ya, de todas formas somos el único grupo político que ha dado la cara y se ha reunido con los vecinos cuando es el alcalde quien tendría que ir a Lakua y explicar en qué consiste el proyecto, es a él a quien le corresponde.

Quizá el PP les haya utilizado...

No, es el juego de la política, en este caso ha habido esta coincidencia...

Donde no hay coincidencia es en el caso de la mezquita.

Exacto. La mezquita es un claro ejemplo de cómo no se deben hacer las cosas y una forma de actuar muy irresponsable por parte del PP porque la labor de los gobernantes es impulsar la convivencia intercultural y solucionar estos asuntos de forma discreta, y ha ocurrido todo lo contrario, se ha utilizado para sacar unos votos alimentando las posturas más intolerantes y extremas. Y como resultado, ahora nos encontramos con un problema mayor que al principio.

Entonces, ¿por qué ha actuado así Maroto?

Ellos han hecho sus cálculos, como en el caso del fraude social, y han visto que era una forma de conseguir votos, porque se trata de un asunto muy populista. Han calculado en clave de rentabilidad electoral, aunque luego al llegar al Ayuntamiento hayan tenido que rectificar o al menos modificar su postura inicial.

Ajá. Algún otro caso de irresponsabilidad por parte del alcalde.

El del fraude social. Por supuesto que hay que hacer un seguimiento de las ayudas que se conceden y atajar el fraude, lo que no se puede es poner el foco en este tipo de engaños que, además, suponen poco dinero y olvidarse del fraude fiscal, que es mucho más grave.

Ahí sí ve necesaria una 'policía de fraude fiscal'.

Exactamente, no se puede estar hablando todos los días durante un mes del fraude social, incluso exagerándolo, y olvidarse del fiscal. Pero eso también marca las prioridades de la persona o del partido y delata el tipo de políticas del PP.

Igual de populista es contratar un asesor vecinal o fijar citas con el alcalde.

Igual de irresponsable. Está claro que la maquinaria de la participación ciudadana es compleja, pero la base está en que los ciudadanos tomen parte desde el principio antes de que el Ayuntamiento tome una decisión, y lo que se nos ha vendido no está mal, pero es otra cosa. Por supuesto que si uno quiere hablar con el alcalde tiene que tener canales, pero lo de la cita es más propagandístico que real.

Cauces existen, aunque según los vecinos no funcionan.

Eso pasa porque no se dan otros mecanismos añadidos. El hecho de que las asociaciones puedan hablar en un consejo territorial no sirve si el Ayuntamiento adopta las decisiones de antemano y, además, genera frustración.

También hay líderes vecinales con ambiciones políticas.

Eso también ocurre, por eso sería sano realizar consultas populares en los asuntos clave, por ejemplo con la revisión del Plan General, que se va a revisar ahora; eso enriquece.

Ya. En ese caso también habría que realizar una segunda consulta para la estación de autobuses.

Ya ha habido un referéndum. Vuelvo a decir, que estamos en el minuto 89, hay un socavón en Euskaltzaindia y la estación de Los Herrán no aguanta más, hay que decidirse ya por Arriaga o Euskaltzaindia.