Un año antes del límite fijado por la Unión Europea, Vitoria contará con un detallado y práctico mapa de ruidos que no sólo contemplará el casco urbano, sino que cubrirá toda la extensión completa del término municipal. Con esta herramienta, el Ayuntamiento podrá conocer con detalle los niveles sonoros que soporta cada uno de los puntos de la capital alavesa y podrá, de esta manera, tomar las medidas adecuadas en cada caso para paliar algo tan molesto como es la contaminación acústica. Esta iniciativa, igualmente ligada al paquete de compromisos ambientales que ha adoptado Vitoria y que contará con una dotación presupuestaria de 100.000 euros, hará especial hincapie en las áreas de influencia de las líneas ferroviarias, el aeropuerto de Foronda, las carreteras más transitadas, el tráfico urbano y las industrias. Una vez establecidas las zonas en las que es necesario reducir el ruido, se pondrá en marcha un plan de acción con acciones concretas para combatir la contaminación acústica. Por el momento, tal y como recordó ayer el alcalde de Vitoria, Patxi Lazcoz, no existe una legislación plenamente desarrollada para garantizar al ciudadano el derecho a un entorno silencioso.
