Vitoria. ¿Por qué Duque de Wellington se ha convertido en el principal punto negro del tranvía? El Ayuntamiento de Vitoria se ha planteado esta pregunta y, pese a anunciar que se sigue estudiando cómo mejorar la velocidad en este cruce entre el tráfico privado y el metro ligero, por ahora tiene clara una respuesta: los conductores de coches deben extremar su precaución en esta zona. El Consistorio valoró que el problema puede deberse tanto a despistes como a malas actitudes al volante. En concreto, a no respetar el semáforo en rojo.
Los incidentes en este punto de la circulación se cuentan por decenas desde la llegada de la línea de tranvía a Lakua. Los últimos se registraron el 9 de febrero y el 1 de marzo, cuando un vehículo invadió el carril del tranvía al intentar cruzar hacia Valentín de Foronda. Esta situación ha reavivado la preocupación en la Casa Consistorial sobre el cruce, que había calmado su siniestralidad desde mediados de 2010 después de que se introdujeran medidas de seguridad. EA preguntó ayer por esta cuestión. El concejal abertzale Antxon Belakortu consideró "evidente" que hay un problema. Y el Ayuntamiento, pese a valorar de forma positiva la marcha de los ajustes de seguridad, adelantó que estudiará nuevos pasos junto a EuskoTren.
El concejal responsable de cuestiones de movilidad, el socialista Joaquín Esteban, recordó que se ha retrasado la zona de parada en el cruce para así facilitar que los vehículos privados puedan ver el semáforo, que éste ahora cuenta con dos cabezales para regular el tráfico de frente y el giro a la derecha, que el desfase de cambio a rojo en esta zona para avisar del paso del tranvía es incluso mayor que en otras zonas y que ahora las luces semafóricas son o rojas o ámbar intermitente, para así alertar a los conductores de que esta zona requiere "prudencia, prudencia, prudencia y respeto".
El representante del equipo de gobierno reveló que, en una reciente visita a la zona, pudo comprobar cómo en poco más de media hora un vehículo se saltó el semáforo en rojo. Esteban dejó la puerta abierta a que este tipo de actuaciones se deban a un despiste o a una imprudencia, pero simplemente constató que no es un hábito aislado. Belakortu, por su parte, se decantó por la primera opción: "El elemento con el que te la juegas (un tranvía de 40 toneladas) es muy superior al vehículo, así que esto debe ser por un despiste". Por ello, el concejal planteó la posibilidad de reordenar el tráfico para restringir un giro a la derecha en Duque de Wellington. Esteban, mientras, recordó que este tipo de cruces se realizan en otras zonas de la ciudad y no acumulan la larga lista de incidentes del punto negro de la línea de Lakua.
El concejal, además, mostró a los grupos municipales dos vídeos que hablaban por sí solos. Las imágenes, captadas a las 9.34 horas del pasado día 1 desde la cámara frontal y un retrovisor del tranvía, muestran el momento en que un vehículo privado cruza por Duque de Wellington hacia Valentín de Foronda y acaba colisionando con el tranvía. Esteban destacó cómo las imágenes mostraban el semáforo en rojo para la conductora del coche. Por casos como éste, Esteban se mostró dispuesto a estudiar mejoras. Pero su mensaje más repetido fue la llamada a la precaución de los conductores para habituarse al paso del tranvía. Una convivencia que el concejal dio por hecha en la ciudad pero que en Duque de Wellington aún sufre tristes encontronazos.